Jengibre y aceite de oliva: así se pueden usar para aliviar el dolor muscular

Los primeros meses del año son para volver a las rutinas, adaptarse a los cambios y finalmente empezar esos propósitos trazados en diciembre, entre ellos: volver al gimnasio. Sin embargo, todo nuevo inicio o retomar ciertas actividades es complicado para la mayoría de las personas y en este caso, el dolor muscular es el protagonista principal.

En contexto, los dolores musculares son comunes y pueden comprometer más de un músculo. Incluso, el dolor muscular también puede involucrar tendones, ligamentos y facias (son los tejidos blandos que conectan los músculos, huesos y órganos). Este tipo de dolor está directamente relacionado con lesión muscular, tensión o sobrecarga por el ejercicio o el esfuerzo físico. El dolor muscular tiende a comprometer a músculos específicos, comienza durante o justo después de la actividad, según el portal MedlinePlus.

Por otro lado, la Organización Mundial de la Salud (OMS) afirma que los trastornos musculoesqueléticos son la principal causa de discapacidad y el dolor lumbar es la causa más frecuente de discapacidad en el mundo. De hecho, es uno de los principales motivos de consulta médica.

Por fortuna existe un remedio casero de jengibre y aceite de oliva, capáz de curar y aliviar este tipo de molestias musculares. Mezclar jengibre y aceite de oliva ayuda a aliviar el dolor, pues ambos ingredientes tienen propiedades analgésicas y antiinflamatorias; la forma de prepararlo es mezclando 150 gramos de jengibre con 250 ml de aceite de oliva, según el portal Mejor Con Salud.

De acuerdo con estudios publicados por Georgia College and State University, el jengibre es un antiinflamatorio natural que reduce significativamente los dolores musculares.

Se debe tener en cuenta que, para alcanzar todos los objetivos en las rutinas de ejercicio, es fundamental la constancia, por esta razón, si las personas han sufrido algún tipo de lesión, se pueden valer de algunos remedios caseros como el jengibre y el aceite de oliva que ayudarán a minimizar el dolor.

Por su parte, el jengibre es una raíz que contiene poderosos nutrientes analgésicos. Además, es también un poderoso diurético y antiinflamatorio; y ayuda a mejorar la circulación sanguínea y los problemas digestivos. También se caracteriza por sus propiedades regeneradoras y afrodisíacas, según el portal GastroLab.

Esta preparación puede durar hasta seis meses y cada que lo administren las personas es importante medir la dosis, pues la cantidad necesaria de este remedio es para calmar el dolor y dependerá de la dolencia. Además, hay que tener presente que su olor también repele mosquitos y otros insectos, según el estudio de la Universidad Dammam (Arabia Saudí).

Aquí el remedio casero de aceite de oliva y su preparación:

Ingredientes:

• 1 taza de jengibre muy fresco (150 g)
• 1 taza de aceite de oliva (250 ml)

Preparación:

• Lavar bien el jengibre y dejar secar durante dos horas.
• Colocar el aceite de oliva en un recipiente para horno.
• Cortar el jengibre, sin retirar la piel, y rallar.
• Luego, añadir al recipiente con aceite de oliva y mezclar bien.
• Esta mezcla se coloca en el horno, a una temperatura de 150 °C. Dejar hervir durante dos horas.
• Cuando se enfríe la mezcla, se vierte en un colador de tela para eliminar los restos de jengibre. Exprimir bien hasta que no quede aceite en la tela.
• Finalmente, guardar en botellas, en un lugar fresco y seco.