Expertos señalan que hay un orden a la hora de comer los alimentos para que no se disparen los niveles de azúcar en la sangre. Foto: Getty images.
La glucosa es la principal fuente de energía del cuerpo humano. No obstante, cuando se presenta una cantidad elevada o insuficiente de este azúcar en el torrente sanguíneo, se pueden desarrollar enfermedades como la diabetes. Foto: Getty images. | Foto: Foto: Getty images.

Vida Moderna

La verdura que ayuda a regular la glucosa y mejora la circulación sanguínea

Contiene nutrientes que generan beneficios al organismo.

Redacción Semana
24 de noviembre de 2023

Gracias a su contenido de micronutrientes (vitaminas, minerales y fibra), las verduras generan beneficios al organismo. Entre ellos, mejorar tránsito intestinal, ayudar a la eliminación de toxinas y contribuir a reducir los niveles de glucosa y colesterol.

Entre las verduras con múltiples aportes están las espinacas. Entre otros beneficios, expertos mencionan que son bajas en calorías y carbohidratos. También son fuente de betacaroteno, es decir, la sustancia química que forma la vitamina A en el organismo.

El Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA) recomienda una porción de 100 gramos de espinacas al día, que contienen 28,1 microgramos de vitamina C y, debido al alto contenido de esta vitamina, ayuda al organismo a reparar los tejidos.

Adicionalmente, contienen un antioxidante conocido como ácido alfa lipoico, que ha demostrado reducir los niveles de glucosa, aumentar la sensibilidad a la insulina y prevenir los cambios oxidativos inducidos por el estrés en pacientes con diabetes. El portal Cuerpo Mente explica que las espinacas “pueden contribuir a estabilizar los niveles de insulina y glucosa debido a su bajo índice glucémico y su capacidad para mejorar la sensibilidad a la insulina”.

Efectos de las espinacas.
Contiene nutrientes que generan beneficios al organismo. | Foto: Getty Images

De igual manera, las espinacas también favorecen la circulación, a la vez que controlan la tensión arterial gracias al ácido fólico que contienen. Son fuente de glicolípidos que mejoran la producción de un vasodilatador natural del cuerpo: el óxido nítrico, que es un regulador de la presión sanguínea. Este alimento es rico en antioxidantes que evitan el deterioro de las paredes de las venas y arterias, previniendo el desarrollo de diversas afecciones circulatorias.

Si bien las espinacas son muy nutritivas y beneficiosas para la salud, es posible que algunas personas experimenten efectos secundarios.
El Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA) recomienda una porción de 100 gramos de espinacas al día, que contienen 28,1 microgramos de vitamina C y, debido al alto contenido de esta vitamina, ayuda al organismo a reparar los tejidos. | Foto: Getty Images
La espinaca tiene vitaminas y minerales que fortalecen el cuerpo.
La espinaca tiene vitaminas y minerales que fortalecen el cuerpo. | Foto: Getty Images

Niveles de glucosa

La glucosa es la principal fuente de energía del cuerpo humano. No obstante, cuando se presenta una cantidad elevada o insuficiente de este azúcar en el torrente sanguíneo, se pueden desarrollar enfermedades como la diabetes.

Es importante realizar exámenes de sangre periódicamente para verificar que los rangos sean normales. Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, señala los niveles de glucosa en la sangre:

  • Normal: menos de 100 mg/dL (5,6 mmol/L)
  • Prediabetes: entre 100 y 125 mg/dL (5,6 a 6,9 mmol/L)
  • Diabetes: 126 mg/dL (7,0 mmol/L) o más en dos pruebas distintas

Síntomas a los que debe prestar atención

A continuación, algunos de los signos que pueden indicar que hay niveles elevados de azúcar:

  • Aumento de la sed y orinar con más frecuencia.
  • Visión borrosa
  • Cansancio.
  • Heridas que no sanan.
  • Pérdida de peso cuando no está tratando de perder peso.
  • Entumecimiento u hormigueo en los pies o las manos.

Los síntomas de niveles bajos de glucosa también se deben tener en cuenta:

  • Sentirse tembloroso o nervioso.
  • Hambre.
  • Cansancio.
  • Sentir mareos, confusión o irritabilidad
  • Dolor de cabeza.
  • Latidos cardíacos rápidos o arritmia (un problema con la frecuencia o ritmo del corazón).
  • Problemas para ver o hablar claramente.
  • Desmayos o convulsiones.

Referencias

Manejo del azúcar en la sangre. Centros para el Control de Enfermedades (CDC).