Riñones
Las piedras en los riñones pueden llegar a producir dolores fuertes y dificultades para orinar. | Foto: Getty Images

Salud

Piedras en los riñones: por qué aparecen y cómo tratarlas

La CUN afirma que estudios recientes indican que el 60 % de los pacientes que han tenido un cálculo tendrán otro antes de 10 años.

10 de febrero de 2022

Las piedras en los riñones, también conocidas como cálculos renales o en formas más avanzadas como la litiasis renal, es una enfermedad crónica que se gesta en el órgano mencionado y que puede llegar a provocar dolores muy fuertes en diferentes partes del torso y a la hora de orinar.

El portal de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, Medline Plus, explicó que estas piedras son materia sólida que se forma en los riñones, estas pueden llegar a ser pequeñas como del tamaño de un grano de arena o, también pueden llegar a crecer hasta parecerse a una perla, por lo que complican el funcionamiento del órgano y en muchas ocasiones, impiden el paso de la orina por las vías urinarias, lo que causaría un fuerte dolor para los pacientes.

“Estudios recientes indican que el 60 % de los pacientes que han tenido un cálculo tendrán otro antes de 10 años, el 35 % antes de cinco años y el 15 % antes de un año del primer episodio”, aseguró la Clínica Universidad de Navarra, haciendo referencia a la incidencia de la enfermedad en pacientes que logran evacuar las cálculos o piedras de los riñones, recalcando que a medida que pasa el tiempo, más probable es que aparezcan de nuevo.

Medline Plus, afirmó que frecuentemente este tipo de piedras son evacuadas de forma natural del organismo a través de la orina, sin embargo, en ocasiones se puede llegar a complicar la tarea, por lo que se recomienda asistir a un especialista médico que emita un tratamiento.

Con respecto a la manera en cómo se producen los cálculos dentro de los riñones, el portal ‘CinfaSalud’ explica que sucede cuando las partículas -minerales o sales ácidas- que nuestra orina contiene y que habitualmente van disueltas se cristalizan”, así entonces, dependiendo la cantidad de material que se quede en los riñones sería el tamaño de los cálculos.

Los riñones cumplen una importante función para el organismo como eliminar toxinas. Foto: GettyImages.
Los riñones cumplen una importante función para el organismo como eliminar toxinas. | Foto: Gettyimages

Estas masas pueden quedarse ahí o desplazarse hasta el uréter y, normalmente, aunque no siempre, se expulsan al orinar. En caso contrario, pueden provocar problemas como dificultad para expulsar la orina y dolor”, continúa afirmando el portal, recordando uno de los síntomas de esta enfermedad.

La organización estadounidense Mayo Clinic asegura que otros de los síntomas que puede llegar a padecer una persona con cálculos o piedras en los riñones van desde los dolores en los costados, la espalda, debajo de las costillas, en la parte baja del abdomen, la ingle; ardor al orinar y variaciones en el color de esta deposición, como roja, rosada o marrón, también puede ser turbia y con mal olor, así como frecuencia en la deposición pero en pequeñas cantidades.

En ocasiones los pacientes con esta enfermedad sufren de náuseas y vómitos, la fiebre y los escalofríos serían persistentes si es que ya se generó infección, recalca la organización. Sobre las causas que pueden llegar a generar esta enfermedad, la organización asevera que se trataría por la forma en cómo se alimenta la persona, en ocasiones puede llegar a ser causa directa del sobrepeso, entre otras.

CinfaSalud hace una serie de recomendaciones para las personas que padecen de piedras en los riñones con el objetivo que, se reduzca la creación de cálculos, se disminuyan los síntomas y se expulsen naturalmente los que ya se encuentran en el cuerpo. El primero es mantener la ingesta de agua, entre dos a tres litros diarios, sin embargo, se debe evitar la ingesta de bebidas que contengan ácido fosfórico y el alcohol, ya que estos contribuyen a la creación de piedras.

Afirma que es necesario disminuir el consumo de sal e ingerir proteína vegetal, en lugar de la tradicional animal. “Huevos, lentejas, arroz blanco, manzanas peladas, uvas, coliflor o calabacín”, serían los alimentos que se deben incluir en la dieta, y por otro lado, tratar de evitar “las espinacas, las nueces, el ruibarbo y el salvado de trigo”, afirma CinfaSalud.