Como es costumbre, con su lenguaje laxo y jocoso, durante este lunes 18 de julio Rigoberto Urán afronta su tercer día de descanso en el Tour de Francia 2022. Una jornada que ha registrado desde temprano en sus redes sociales mostrando cada uno de los movimientos que ha hecho.

Desde el día anterior, una vez terminada la etapa 15 en la que fue protagonista de la carrera. El corredor del EF Education First mostró parte de su dieta en el día de descanso de la ronda gala, allí se integró en la cocina y el trabajo del chef del equipo para mostrar a los aficionados qué podían comer en el denominado rest day.

“Aquí tenemos el chef, vea pues, qué belleza”, “en el día del rest day, buena carne”.

Rigoberto Urán en el Tour de Francia 2022 | Foto: Screenshot: rigobertouran

Por otra parte, dijo a sus seguidores y los amantes del ciclismo que la ingesta de dicha proteína era buena para los días de descanso, además, los invitó a consumirla: “Ustedes los que montan bicicleta ya saben, ¿el día de descanso qué tiene que comer?, carne, carne mari... qué maravilla”.

Tras dicha recomendación, el pedalista colombiano volvió a aparecer casi 24 horas después en otra de las actividades destinadas para su día de relajamiento de la carrera, allí se mostró casi desnudo sobre una camilla en donde procederían a realizarle algunos masajes para distensionar los músculos y mejorar algunas heridas que ha sumado en la piel tras las caídas en la competencia.

Con su lenguaje particular y sin pelos en la lengua se mostró tranquilo y a la espera de la intervención del profesional de su equipo, con el que bromeó y hasta se atrevió a criticar por no haber logrado mejorar sus laceraciones. Rigo inició una grabación corta que dejó consignada en su redes sociales, así: “Entonces qué muchachos, puro día de descanso, buen masaje y clara de huevo para las heridas”.

Criticando a su masajista por al parecer no haber hecho su trabajo de la manera correcta, expresó: “Aquí el masajista no ha sido capaz de cuadrarme en ocho días que lleva”.

A lo que el masajista defendiendo su trabajo, le dijo: “Hey papi, mira cómo estás. ¿Qué quieres que le haga algo ahí?”.

Para hacer aún más doloroso el comentario hacia el profesional, Rigo se atrevió a decir que dos de sus familiares en Colombia ya lo hubieran ayudado de buena manera con esas molestias físicas: “Si yo estuviera en Colombia, le cuento que mi mamá me lo hubiera cuadrado ya, o la suegra”.

Hasta se atrevió a revelar los secretos y los métodos con los que en su tierra natal le hubieran curado las raspaduras que tiene en el costado derecho del cuerpo: “Eso le echaban miel, clara de huevo, de todo, parce. Puros remedios caseros son los que sirven”.

Para concluir y casi dándose por vencido, Urán le hizo el último pedido a su compañero de equipo en busca de mejorar el estado físico de manera pronta: “Póngale crema a ver si se cuadra esta huev...”.