Esto no solo lo recomendamos por la importancia probada de crear y mejorar las capacidades de las empresas; si no, también, para que las organizaciones conozcan hasta el más mínimo detalle de sus operaciones de tal forma que cuando se presenten situaciones extraordinarias, como las que tristemente estamos viviendo hoy en día, sepamos qué modelos podemos usar y cómo adaptarlos a la operación. Bien sea para la implementación de esquemas de trabajo remoto, para habilitar nuevos canales de comunicación con nuestros clientes; o para hacer una gestión eficiente de la información de la empresa y que todos puedan encontrar y usar lo que necesitan fácilmente. En general, es preciso implementar habilitadores que hoy en día se encuentran, no solo como algo deseable en una empresa, sino incluso necesario si se quiere salir adelante ante el escenario de crisis financiera y empresarial que amenaza con caer en las economías mundiales sin distinción de tamaño o nacionalidad.

Aunque con seguridad muchos líderes empresariales no tienen mayor preocupación ante estos escenarios, porque han hecho una labor atenta de preparación, también estoy seguro de que muchos más no estarán tan tranquilos ante las circunstancias adversas pues ven cómo aquellos planes de continuidad del negocio que alguna vez fueron creados y luego archivados en el rincón más oscuro de la empresa, hoy en día resultan poco efectivos para atender la coyuntura que se nos plantea ocasionada por el coronavirus.  Hoy más que nunca vale la pena resaltar que cuando hablamos de transformación organizacional para equipos jurídicos no se trata de escribir un par de políticas y comprar una herramienta y luego decir que somos muy innovadores en nuestra gestión. Se trata de que toda la empresa está culturalmente orientada a un esquema de trabajo resiliente y adaptable que sea capaz de hacer frente a escenarios no esperados, esto a su vez tiene que ver con tener procesos correctamente identificados y analizados. La resiliencia se relaciona con la importancia de que el equipo conozca su función y sepa cómo su trabajo apalanca el cumplimiento de los objetivos organizacionales. Así mismo se asocia a que la empresa cuente con las herramientas de tecnologías adecuadas para que los colaboradores puedan desarrollar su trabajo de forma idónea y a que la información se encuentre almacenada y lista para ser consultada por cualquier colaborador que la necesite, etc.

Ojalá sea esta crisis también una oportunidad para que como profesión, e incluso como sector económico de servicios jurídicos, encontremos nuevas formas de operar y servir a nuestros clientes. Tenemos que terminar con la malsana costumbre de solo preocuparnos por mejorar nuestra operación cuando tenemos una crisis tocando a la puerta. Ahora nos encontramos ante una potencial recesión económica que promete ser peor que la que vivimos en 2008, pero al mismo tiempo nos encontramos con la oportunidad de aprender de los errores pasados y comprender lo que alguna vez mencionó el expresidente norteamericano Jhon F. Kennedy: “the time to repair the roof is when the sun is shining” (es más fácil reparar el techo cuando no está lloviendo).  *Senior Manager. Legal Operations Services. EY Law Latin America North (LAN)