Este fin de semana, el fútbol femenino se robó todas las miradas del mundo con las diferentes finales de los torneos continentales que se llevaron a cabo. De este lado del planeta, la Copa América hizo vibrar a miles de almas con la gran final entre Colombia y Brasil, la cual terminó con victoria de las cariocas por la mínima diferencia. Por otro lado, en el viejo continente, Inglaterra y Alemania generaron revuelo con una emocionante final de la Eurocopa, la cual se quedó en casa de las inglesas.

Ahora bien, más allá del espectáculo mostrado por las jugadoras en cancha, en las tribunas también se logró un paso importante, pues miles de aficionados inundaron las gradas para demostrar su apoyo a las finalistas. La fiesta fue redonda en la Eurocopa, pues el país anfitrión (Inglaterra) logró el título al ganarle 2-1 a sus rivales con goles de Ella Toone (62′) y Chloe Kelly (110′), tantos suficientes para que las dirigidas por Sarina Wiegman obtuvieran su primer título en esta categoría.

Sublimes recibimientos

Después de la gran final continental, ambas selecciones, tanto la inglesa, como la alemana, fueron recibidas por lo alto por miles de aficionados. Por el lado del perdedor, Alemania, la ciudad de Frankfurt se prestó para un gran evento donde las calles estaban llenas de fanáticos que recibieron a las teutonas con banderas.

En total fueron unas 7 mil personas que con aplausos y cánticos, enaltecieron el gran nivel de sus representantes en el continente europeo.

No obstante, las más recientes campeonas, fueron las que rompieron los esquemas con su celebración. Al celebrar uno de los títulos más importantes de su historia, las inglesas pusieron a bailar a sus seguidores en las calles.

Al ritmo de la canción Sweet Caroline (Neil Diamond), la fiesta fue monumental para los británicos.

Récord de asistencia en la final

Con 87.192 espectadores presentes en Wembley, la final Inglaterra-Alemania batió este domingo el récord de afluencia en un partido de la Eurocopa de fútbol, sea masculina o femenina.

El precedente récord databa de la final de la edición masculina de 1964 en España, donde el país anfitrión había derrotado a la URSS (2-1) ante 79.115 espectadores.

El partido inaugural, que enfrentó a Inglaterra y Austria, ya había significado el récord para un partido de la Eurocopa femenina con 68.871 espectadores, mientras que el récord para un partido de las leonas había sido establecido en 2019, con 77.768 espectadores, también en Wembley y contra Alemania, en un partido amistoso.

El récord absoluto para un partido de fútbol femenino fue batido en dos ocasiones, la pasada primavera (boreal) por el Barcelona, en el Camp Nou, único estadio de Europa con mayor aforo que Wembley. El 23 de abril, 91.648 espectadores acudieron a presenciar la semifinal de la Liga de Campeones femenina entre el Barça y el Wolfsburgo alemán.

Para la final de la Eurocopa, las entradas tenían un precio de venta entre 15 y 99 euros (15,3 y 101 dólares).