Periodistas, abogados, el expresidente de la Uefa, Michel Platini, y una senadora francesa fueron blanco de piratas cibernéticos contratados para proteger la reputación de Qatar en el marco de la organización del Mundial 2022, revela el domingo el Sunday Times.

Estas personalidades fueron espiadas debido a sus posiciones críticas sobre la atribución y organización de la Copa del Mundo de Fútbol por Qatar, que comenzará el 20 de noviembre.

En particular, se cuestiona el trato de los trabajadores extranjeros en las obras relacionadas con la competencia o las violaciones de los derechos de mujeres y personas LGTB.

El Mundial se hará por primera vez este año en un país de Oriente Medio. | Foto: AP/Nariman El-Mofty

Entre las personalidades víctimas de estos piratas digitales se encuentran periodistas, como Jonathan Calvert –del Sunday Times–, que investigó las maniobras de corrupción que condujeron a la adjudicación de la competición en Qatar en 2010. También una senadora francesa, Nathalie Goulet, que acusó a Qatar de financiar “el terrorismo islámico” y el abogado húngaro-estadounidense Mark Somos, que presentó una denuncia contra la familia real de Qatar ante el Alto Consejo de las Naciones Unidas para los derechos humanos.

Platini, presidente en aquel momento de la Uefa y gran defensor de la candidatura de Qatar para organizar el Mundial, también habría sido espiado.

Según los datos recopilados por el Sunday Times, las operaciones de piratería de buzones de correos electrónicos o el control remoto de micrófonos y cámaras de las computadoras de unas cincuenta personalidades fueron llevadas a cabo desde diciembre de 2019 por un grupo de piratas cibernéticos indios.

Los abogados del Gobierno catarí, interrogados por el periódico, negaron la implicación de su país.

La petición de la Fifa

Antes de este nuevo escándalo, los dirigentes de la Fifa hicieron un llamamiento a las 32 selecciones participantes en el Mundial catarí (20 noviembre-18 diciembre), cercado por las polémicas sobre los derechos humanos, a “centrarse en el fútbol”, en una carta revelada el viernes por Sky News.

“Portáis sobre vuestros hombros las esperanzas y los sueños de vuestra nación y de sus habitantes (...) Así que, por favor, centrémonos en el fútbol ahora”, exhortaron Gianni Infantino y Fatma Samoura, respectivamente presidente y secretaria general de la instancia en un correo confirmado a la AFP por la Fifa.

Inhabitual por su tono y su contenido, esta carta alude, sin mencionarlas, a las tomas de posición realizados por varias selecciones sobre el respeto a los derechos de los trabajadores y de las personas LGBT+ por el pequeño emirato, que también es criticado por el costo medioambiental del torneo. “Sabemos que el fútbol no vive en el vacío y todos somos también conscientes de los numerosos retos y dificultades de naturaleza política en el mundo”, reconocen ambos dirigentes, “pero, por favor, no permitan que el fútbol sea arrastrado en cada batalla ideológica o política”.

La Fifa no se pronuncia sobre si aprueba o desaprueba que, como ha sido anunciado, varios capitanes de selecciones europeas –como Inglaterra, Francia y Alemania– luzcan brazaletes color arcoíris con el mensaje ‘One Love’, en un país que castiga las relaciones homosexuales.

Tampoco responde al video difundido la semana pasada en el que 16 integrantes de la selección australiana critican el no respeto de los derechos humanos y explican haber “escuchado a organizaciones como Amnistía Internacional y, “más importante, a trabajadores extranjeros en Qatar”.

Gianni Infantino, presidente de la Fifa, ultima detalles para el Campeonato del Mundo. | Foto: (c) Copyright 2022, dpa (www.dpa.de). Alle Rechte vorbehalten

En términos muy generales, Gianni Infantino y Fatma Samoura afirman que la Fifa “intenta respetar todas las opiniones y creencias, sin por ello dar lecciones de moral al resto del mundo”, apelando al respeto de la “diversidad”.

“Ningún pueblo, ninguna cultura o nación es mejor que otra. Este principio es la piedra angular del respeto mutuo y de la no discriminación. Y es también uno de los valores fundamentales del fútbol”, insisten en la misiva.

Amnistía Internacional, a través de su responsable de justicia económica y social Steve Cockburn, estimó por su parte que “aunque Gianni Infantino quiere que el mundo se centre en el fútbol’, hay una solución simple: que la Fifa comience a abordar los graves problemas de derechos humanos en lugar de esconderlos bajo la alfombra”.

“Una primera etapa consistiría en comprometerse públicamente en crear un fondo para indemnizar a los trabajadores migrantes antes del inicio del torneo, y a velar por que las personas LGBT no sean víctimas de discriminación o de acoso”, añade en un comunicado.

*Con información de la AFP.