Una vez América de Cali hizo oficial la llegada de César Farías como nuevo entrenador, el camino de Ricardo Gareca quedó libre para concretar su próximo destino lejos del fútbol profesional colombiano.
Aunque el estratega argentino escuchó lo que la presidenta Marcela Gómez tenía para decir, la oferta ni siquiera alcanzaba a competir con la de Chile, que busca timonel luego de la salida de Eduardo Berizzo por malos resultados en el arranque de las eliminatorias al Mundial de 2026.
Gareca fue el máximo candidato desde finales del año pasado, pero la negociación se mantenía a fuego lento mientras se estudiaban otras opciones. Cuando América apareció en escena, según confesó el propio Tulio Gómez, La Roja volvió a escena y apretó el acelerador para evitar que el entrenador firmara su contrato para volver al club del que fue ídolo como futbolista.
El ‘Tigre’ alcanzó a preparar su viaje a Cali, hasta que recibió una llamada desde Santiago en la que le pusieron sobre la mesa una oferta formal imposible de rechazar. América se salió de la carrera y enfocó sus esfuerzos en Farías, mientras Gareca se acercaba cada vez más al combinado austral.
La mechita hizo oficial a Farías este lunes y, como consecuencia, en la prensa chilena empezaron a tender la alfombra roja para la llegada de Ricardo Gareca, quien alista maletas para desembarcar en la capital chilena.
“Entre gallos y medianoche, las principales autoridades de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional de Chile llegaron a un ‘acuerdo total’ con la representación de Ricardo Gareca para que el experimentado entrenador argentino se convierta en el nuevo seleccionador del combinado trasandino”, informó el periodista argentino Fernando Czyz.
En horas de la mañana, desde Chile corroboraron la información y dieron por hecho que Gareca será el nuevo director técnico, a menos que suceda algo extraordinario.
“Hay acuerdo entre la ANFP y Ricardo Gareca para que se convierta en el nuevo técnico de la selección chilena. Solo falta la firma, pero se espera que, entre viernes o sábado, esté en Santiago para cerrar su vínculo con La Roja”, dijo Pablo Ramos en ESPN Chile.
El último equipo del ‘Tigre’ como director técnico fue Vélez Sarsfield, en el primer semestre de 2023, justo después de su intempestiva salida de Perú, al que llevó al Mundial de Rusia 2018 y estuvo a punto de clasificar a Catar 2022.
Con los incas, Gareca protagonizó un largo proceso que dio como resultado la explosión de grandes figuras y la consolidación de los más veteranos. Aunque no coronó con títulos su proceso, sí dejó logros importantes como la disputa de la final de la Copa América 2019 en la que cayeron con Brasil.
Esa es una de las razones por las que en Perú toman como ‘traición’ el hecho que su extécnico sea nuevo timonel de Chile, rival histórico y geográfico en las eliminatorias suramericanas.
Según trascendió desde ese país, las razones de la separación fueron desacuerdos con la dirigencia, que, según entendió Gareca, no le dio el valor necesario a su trabajo para devolver a la Bicolor al Mundial luego de varias décadas.
En la campaña a Catar 2022, el argentino ganaba 3,7 millones de dólares por año y la nueva propuesta con la que lo querían convencer rondaba los 2,2 millones de dólares anuales, una reducción considerable solo por haber caído en el repechaje contra Australia.
En ese sentido, hay que recordar que Gareca se había negado a entablar conversaciones con Colombia y otras selecciones por respeto a Perú, poniendo como prioridad el continuar al frente del banquillo en el que dejó un vacío difícil de llenar para el ciclo mundialista hacia la Copa del Mundo de 2026.
Gareca dirigió 96 partidos con Perú: obtuvo 40 triunfos, 21 empates y 35 derrotas.