No hay nada más permanente que lo temporal y así ocurrió con el impuesto del 4 x 1.000. Aunque múltiples veces se han radicado proyectos de ley en el Congreso de la República para desmontarlo, hasta el momento ninguno ha tenido éxito y ya tiene 24 años de vigencia en Colombia.

Luis Carlos Reyes, nuevo jefe de la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (Dian), aseguró hace unos días que este tributo se acabaría en el país para las personas que hagan movimientos menores a los 13,3 millones de pesos al mes, puesto que esperan que el artículo 64 de la reforma tributaria sea aprobado.

“Se acaba el 4 x 1.000 para quienes hagan movimientos menores a 13,3 millones de pesos al mes. Ya existe una exención para una sola cuenta bancaria marcada. En adelante, los bancos deberán consolidar información entre ellos para que la exención aplique sin necesidad de marcar la cuenta”, precisó el funcionario.

No obstante, el ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, rompió el silencio este viernes 19 de agosto con respecto a este tema y anunció que el polémico tributo continuará en el gobierno del presidente Gustavo Petro.

El economista aprovechó la Convención Bancaria, que se llevó a cabo en Cartagena, para puntualizar que no han encontrado cómo reemplazar los recursos económicos que recauda el impuesto del 4 x 1.000 anualmente.

“El 4 x 1.000 continúa, punto. No hay forma de reemplazarlo. Vamos cinco o seis gobiernos, y [en] ninguno hemos tenido una alternativa interesante de cómo reemplazarlo”, sentenció Ocampo en medio del evento.

Luego, el jefe de la cartera de Hacienda añadió: “Estamos pensando cómo modificarlo. Hoy hablaba con la gente de la Asociación Bancaria y ellos dicen que de pronto valdría la pena eliminarlo para el régimen simple de tributación”.

Cabe recordar que actualmente cada usuario puede marcar una de sus cuentas bancarias para eximirla de este impuesto, pero la reforma tributaria plantea que las que se eximan sean las transacciones menores a 13,3 millones de pesos.

Hernando José Gómez, presidente del gremio de banqueros, también presentó en la convención la posición del sector financiero y avanzó en propuestas que le harán llegar al gobierno en medio del debate.

De acuerdo con el directivo, el proyecto económico del actual gobierno plantea lograr que las personas utilicen más plenamente esa exención, pues hoy solo aplica para una sola cuenta. “Ahora quisieran que sea más flexible, que sea una especie de cupo para que la persona lo utilice donde quiera”, argumentó.

Sin embargo, precisó: “Eso nos genera un reto operacional y operativo muy grande, porque cada banco tiene su contabilidad y seguimiento en tiempo real de lo que pasa con sus clientes. Lo que pasa es que no sabemos lo que tiene realmente cada banco”.

El impuesto del 4 x 1.000, también conocido como gravamen a los movimientos financieros (GMF), nació para hacerle frente a la crisis bancaria por la que estaba pasando el país en el año de 1998. Además, es un tributo que cobran todas las entidades financieras, incluidas las billeteras digitales.