Al menos el 98 % de la economía de San Andrés, Providencia y Santa Catalina dependen del turismo, impactado en los últimos años por la pandemia, el huracán Iota, el cobro del 19 % de IVA a los tiquetes aéreos desde 2023 y la salida del mercado de las aerolínea de bajo costo.

Por eso, en los comicios regionales de 2023 resultó determinante que Nicolás Gallardo, empresario hotelero y constructor de la isla, conociera muy de cerca las necesidades del sector para poder darle un impulso.

Los representantes de los gremios en el territorio insular tienen las esperanzas puestas en Gallardo, quien desde su llegada a la gobernación ha concentrado esfuerzos en atender algunas de las problemáticas más visibles: la de la basura. A esto responde en buena parte la campaña ‘San Andrés Bella y Limpia’, que además de embellecer la ciudad, busca penalizar a quienes sigan ensuciando la isla. “La meta es que cuando el visitante llegue, se encuentre con un espacio limpio, sano y, muy importante, que quiera volver”, precisó el gobernador.

Para Gallardo embellecer la ciudad no solo busca atender el tema de la basura, también recuperar las calles, mejorar las vías y contribuir a terminar obras inconclusas. Para lograrlo, convocó a la empresa privada para que trabaje de forma articulada con la administración departamental en la adopción y ejecución de proyectos de infraestructura y de programas recreativos, deportivos y culturales.

El gobernador de San Andrés, Providencia y Santa Catalina tiene muy claro la importancia de promocionar la isla que de acuerdo con Gallardo, es un paraíso que muchos colombianos olvidan que tienen muy cerca, dentro del territorio nacional.

“La gente habla de Bali, Maldivas o Bora Bora, y sí, son increíbles, pero San Andrés no tiene nada que envidiarles. Me refiero a poder ir nadando hacia Johnny Cay o el Acuario y tener la posibilidad de ir viendo el fondo del mar, los colores del azul, cómo pasan las mantarrayas”, señaló.

Para que lleguen más turistas, en este cuatrienio se podría materializar la ejecución del nuevo aeropuerto, en espera desde hace casi una década, que demandará de una inversión de al menos 1 billón de dólares y generará, según estimaciones de la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI), al menos 8.000 empleos, entre directos e inducidos.

Providencia y Santa Catalina

Para Providencia y Santa Catalina sumar visitantes nacionales es un desafío mayor, porque adicional al vuelo que hay que tomar a San Andrés, se debe presupuestar uno adicional para llegar a las islas. Es quizá por esto que la mayoría del turismo que reciben es de extranjeros.

Desde el paso del huracán Iota, en 2020, que destruyó el 98.5 % de las viviendas, Providencia ha dado muestra de una ejemplarizante capacidad de resiliencia, al procurar la subsistencia con la lenta recuperación del turismo, y sus otras dos principales actividades económicas considerablemente afectadas: la pesca y la agricultura.

“Queremos concentrarnos en recuperar esas fuentes de ingreso, las actividades económicas por excelencia del municipio, que, históricamente, han sido el sustento de nuestras familias; porque necesitamos un ingreso, vivir de algo, producir, vender un bien o un servicio”, señaló su alcalde, Álex Ramírez Nuza.

Entre 2016 y 2019, Providencia recibía alrededor de 30 mil turistas. En 2020 y 2021 la cifra cayó a cero; y en 2022 comenzaron a recuperarse lentamente, hasta alcanzar los 22 mil en 2023.