En materia de producción de energía, Colombia es uno de los países que menos genera contaminación. Sin embargo, en cuestión de movilidad la situación es diferente, tanto así que en ciudades como Medellín y Bogotá, y a raíz de los altos niveles de contaminación, se han tomado fuertes medidas para disminuir su afectación en las personas.

Según la Secretaría de Ambiente de Bogotá, más del 60 por ciento de la contaminación por fuentes móviles obedece a las emisiones de buses y camiones, con 21,8 por ciento y 38,5 por ciento, respectivamente.

Ante esta situación, uno de los planes para bajar las emisiones es la instalación de gas natural vehicular, en la que Vanti es líder. Este sistema permite reducir en 99,9 por ciento las emisiones de material particulado, que es el gas que afecta la calidad del aire y produce enfermedades respiratorias.

En la actualidad, más de 600.000 automotores se movilizan con ese combustible en el país. Por ejemplo, en Bogotá, cerca del 60 por ciento delos taxis lo tienen como fuente principal de energía, produciendo, de acuerdo con la Secretaría de Ambiente, en promedio el 0,2 por ciento de la contaminación por fuentes móviles.

“No solo contribuimos con el medio ambiente, además, ahorramos dinero para llevar el diario a la casa. En el turno que yo hago, por ejemplo, con gasolina me gasto de 30 a 35.000 pesos diarios, y con gas natural vehicular 15.000 pesos”, dice Jorge García, quien es taxista hace más de 15 años.

Más de 600.000 vehículos en Colombia se movilizan usando Gas Vehicular como combustible, entre ellos 1.052 del sistema de Transmilenio. | Foto: Cortesía Vanti

En el caso de Transmilenio, el año pasado cerró con 1.052 buses a gas natural Euro 6, y con ello se disminuyó el impacto ambiental al realizar la reposición de la antigua flota Diesel contaminante, por una de ultra bajas emisiones. Esto permitió emitir 90.000 toneladas de CO2 menos desde el primer periodo de operación, es decir, desde julio de 2019, así como 4,7 toneladas de material particulado fino y 1.635 toneladas de NOX. Lo anterior se tradujo en una mejora ostensible en la calidad del aire de los bogotanos e impactó directamente a más de 80 millones de pasajeros que se transportaron en esa flota.

El último estudio de calidad del aire dentro del sistema de Transmilenio, realizado por la Universidad de los Andes, evidencia una reducción de 75 por ciento de la contaminación dentro del sistema con la entrada de los buses con esa tecnología limpia. A lo anterior se suma que por las carreteras del país se encuentran rodando más de 500 tracto camiones con gas natural vehicular.

Según Vanti, en conjunto con los fabricantes de vehículos se hace la instalación del kit de gas natural desde cero kilómetros y con garantía de fábrica, con 12 marcas y 32 líneas diferentes de vehículos.

Y, frente al mito urbano de que los motores se dañan con el gas natural vehicular, los expertos de Vanti son claros en negarlo. De hecho, el desgaste no depende del combustible, sino de la calidad de la combustión (aire, combustible, energía, mezcla y compresión). Y en ese sentido, las instalaciones a gas natural vehicular incluyen un proceso de calibración que garantiza una buena combustión.

En ese sentido, es clave asegurarse de acudir a un centro de instalación autorizado que cuente con los equipos y herramientas adecuadas, así como con el personal calificado para alargar la vida del vehículo.