En un movimiento diplomático único, un grupo de 20 diplomáticos retirados estadounidenses ha enviado una petición urgente a Estados Unidos, instándolo a considerar la reimposición de sanciones económicas contra el régimen venezolano de Nicolás Maduro. Este llamado surge en respuesta al bloqueo por parte de las autoridades venezolanas de la candidatura de María Corina Machado y de su reemplazo designado, Corina Yoris.
La medida, según los exfuncionarios estadounidenses, constituye una clara violación de los principios democráticos y los derechos políticos fundamentales en Venezuela que se vive a raíz de la dictadura que ha impuesto Maduro desde su llegada a la presidencia en 2012. María Corina Machado, conocida por su firme postura contra el régimen, ha enfrentado una serie de obstáculos en su camino hacia la candidatura presidencial.
Su exclusión del proceso electoral ha suscitado preocupación tanto a nivel nacional como internacional, siendo interpretada como un intento más por parte del gobierno venezolano de socavar la oposición y mantener un control autoritario sobre el poder. Ante este escenario, los diplomáticos han hecho un llamado enérgico a Estados Unidos para que tome medidas contundentes en apoyo a la democracia venezolana y la defensa de los derechos humanos.
La carta fue firmada por 20 exdiplomáticos y fue enviada con el secretario de Estado, Antony Blinken, como remitente de la misiva. “Como exfuncionarios estadounidenses con larga experiencia en las relaciones de Estados Unidos con América Latina, tenemos un profundo interés en los esfuerzos para encontrar una solución democrática a la crisis en Venezuela”, dice la comunicación en su inicio.
“Primero, respetuosamente lo instamos a declarar inequívocamente que, a menos que el régimen de Maduro permita que la oposición presente sin más demora un candidato presidencial de su elección, las autoridades estadounidenses rescindirán la Licencia General 44 que autoriza transacciones de petróleo y gas en Venezuela y renovarán fuertes sanciones contra los funcionarios”, continúa la carta.
Luego, la misiva dice que en caso de que no se permita la participación de María Corina Machado, significaría un revés sin igual para la democracia venezolana, instando a los Estados Unidos a poner la candidatura de la opositora como condición para que no se retomen las sanciones. “Pedimos que declare públicamente que la legítima participación de María Corina Machado en las elecciones es una condición para que Estados Unidos extienda el alivio de las sanciones o reconozca los resultados electorales”.
“Si la diplomacia estadounidense no logra adoptar una postura clara sobre estos temas, creemos que Maduro seguirá pisoteando el acuerdo de Barbados y destruyendo las perspectivas de una Venezuela estable y democrática. En contraste, al insistir en que Maduro respete la voluntad de los votantes primarios de la oposición y aumentar el costo de su fracaso en hacerlo”, continúa la comunicación.
Así mismo, se manifiestan por el sospechoso asesinato del militar disidente venezolano Ronald Ojeda, quien murió en extrañas circunstancias en Chile después de un secuestro del que se ha acusado al régimen de Maduro de haberlo ordenado con ayuda de la agrupación criminal del Tren de Aragua, así como muestran su rechazo a las capturas y presiones sobre opositores de Vente Venezuela. “El gobierno de Estados Unidos debe advertir a Maduro que tendrá que rendir cuentas por las continuas amenazas o violencia contra la señora Machado y sus partidarios”.
La carta fue firmada por el exembajador de Estados Unidos en Colombia, Michael McKinley, el exrepresentante Especial de Estados Unidos para Venezuela, Elliott Abrams, la exsubsecretaria de Estado de Estados Unidos para Asuntos Globales, Paula Dobriansky, el exembajador de Estados Unidos en Venezuela, Patrick Duddy, el exembajador de Estados Unidos en Venezuela, Michael Skol y otros 15 antiguos diplomáticos.