Desde que este martes –15 de noviembre– el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, oficializó su candidatura presidencial, el radar se “volcó” nuevamente hacia quien cuyo lema ha sido “hacer que América vuelva a ser grande”. Los titulares siguen acaparando las posibilidades y si es pertinente o no que retorne a la Casa Blanca tras una ausencia controvertida.
En esta jornada, medios locales anticiparon que el secretario de Justicia, Merrick Garland, designaría a un fiscal independiente en el marco de las indagaciones contra el exmandatario. Minutos más tarde, el propio Departamento de Justicia emitió un comunicado confirmando que esa tarea quedará a cargo del exfiscal jefe del tribunal especial de La Haya, Jack Smith.
“Con base en los acontecimientos recientes, incluido el anuncio del expresidente de que es candidato a presidente en las próximas elecciones, y la intención declarada del presidente en ejercicio de ser candidato también, he llegado a la conclusión de que es de interés público nombrar a un abogado”, dijo Garland, quien agregó que “tal nombramiento subraya el compromiso del Departamento tanto con la independencia como con la rendición de cuentas en asuntos particularmente delicados”.
El republicano, que aspira terminar con la ‘era Biden’, en 2024, tiene en contra varias investigaciones que abarcan desde su ejercicio como jefe de Estado hasta sus finanzas personales. Una de estas busca aclarar si hubo interferencia en la transferencia de poder, tras las elecciones de 2020.
Otro de los procesos se centra en la seguridad nacional, luego del allanamiento en su residencia de Mar-a-Lago (Florida) y los documentos clasificados que le fueron confiscados. En esa misma línea, se buscará evaluar si hubo intentos por obstruir esa investigación.
Tropiezos de Donald Trump
Las elecciones intermedias (del 8 de noviembre) permitieron entrever una distancia entre los republicanos y quien en su momento fue el “ancla” de ese partido, a razón de que no se consiguió el control de ambas Cámaras en el Congreso y, en el caso, de la Cámara de Representantes, la diferencia con los demócratas es mínima.
“Los republicanos miran con desconcierto esta candidatura (...). Ahora lo contradicen y se quieren alejar de él porque saben que les está costando curules (...), y posiblemente la llegada a la Casa Blanca. Tanto, que Ivanka Trump (la hija) y Mike Pence (exvicepresidente)” están tomando distancia, explica a SEMANA el analista político, Robert Valencia.
Para el experto, con la nueva aspiración de Trump al cargo más importante del país, se busca que las investigaciones en contra pasen a un segundo plano. Por ejemplo, para él, se amplía la posibilidad de que se desmantele la comisión creada para investigar su rol en el asalto al Capitolio (a comienzos de 2021).
“Esto lo hace porque quiere evadir la justicia y por su ego (...). Es una persona que no atiende el llamado de sus asesores, que actúa por impulso y él ya sabe quienes son sus principales contendores; el gobernador de Virginia, Glenn Youngkin; y el de Florida, Ron DeSantis”, con quienes los republicanos pueden tener una mayor “afinidad”, agrega Valencia.
Esta misma semana, la propia hija y exasesora del exmandatario, Ivanka, confirmó que no participará en la campaña de Trump, pero que lo apoyará desde otras esferas. “Quiero mucho a mi padre, pero esta vez elijo priorizar a mis hijos pequeños y la vida privada que estamos creando como familia. No planeo involucrarme en política”, dijo.
Con los comicios de medio término, que representan además un tipo de referéndum para el gobierno Biden, comenzó la carrera presidencial de 2024. Su desarrollo está programado para el mes de noviembre.