Un nuevo escándalo de presunta corrupción sacude el mundo político de Estados Unidos, que involucra a una congresista demócrata con fondos de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA, por sus siglas en inglés).

Se trata de la actual representante demócrata, Sheila Cherfilus-McCormick, de Florida, que fue acusada por un jurado federal de “robar” 5 millones de dólares del FEMA con fines electorales.

El FEMA es vital al momento de atender contingencias por desastres causados por fenómenos naturales. | Foto: 2025 J. David Ake

El Comité de Ética de la Cámara de Representantes había declarado públicamente en enero de 2025 que también estaba investigando a Cherfilus-McCormick, tras recibir una denuncia de la Oficina de Ética del Congreso en septiembre de 2023, reporta ABC News.

Los detalles de la acusación a la demócrata

Según el Departamento de Justicia, Cherfilus-McCormick y su hermano, Edwin Cherfilus, recibieron la cantidad expresada dirigidos a su empresa familiar de atención médica, en relación con un contrato para personal de vacunación contra covid-19 en 2021.

Después, la política y otras personas habrían usado los fondos pagados para su campaña al Congreso de 2021 a través de varias cuentas para ocultar su origen.

En diciembre de 2024, una agencia estatal de Florida demandó a una empresa propiedad de la familia Cherfilus-McCormick, alegando que había cobrado al estado casi USD$ 5,8 millones de más por trabajos realizados durante la pandemia y se negaba a devolver el dinero, indica AP.

Pam Bondi, fiscal general de EE. UU., afirmó que “utilizar fondos destinados a la ayuda en casos de desastre para el enriquecimiento personal es un delito particularmente egoísta y cínico”.

“Nadie está por encima de la ley, y mucho menos las personas poderosas que roban a los contribuyentes para su beneficio personal. Seguiremos los hechos de este caso y se hará justicia”, agregó Bondi.

La defensa de Cherfilus-McCormick

Los abogados de la implicada sostuvieron en un comunicado que Cherfilus-McCormick “es una servidora pública comprometida, dedicada a sus electores. Lucharemos para limpiar su nombre”.

Po su parte, la demócrata se defendió diciendo que “esta es una acusación injusta, infundada y fraudulenta, y soy inocente. El momento elegido resulta curioso y claramente pretende desviar la atención de asuntos nacionales mucho más urgentes”.

“Desde el primer día, he cooperado plenamente con todas las solicitudes legales y seguiré haciéndolo hasta que este asunto se resuelva”, alegó la representante.

Cherfilus-McCormick se tomará una licencia de su cargo en un Subcomité de Asuntos Exteriores del Congreso mientras el caso se desarrolla.