En medio de la audiencia que se reanudó este miércoles contra Nicolás Petro Burgos, la Fiscalía General anunció que desistía de imputarle el delito de falso testimonio.
Tras resolver las observaciones hechas por el juez 14 de control de garantías de Barranquilla, la fiscal Lucy Marcela Laborde indicó que esto ya está incluido en el cargo de falsedad ideológica en documento público.
Este hecho tenía relación con la supuesta información falsa que habría presentado Nicolás Petro Burgos al Sistema de Información y Gestión del Empleo Público (SIGEP) sobre su hoja de vida y experiencia laboral.
“Esta conducta queda íntegramente subsumida en el tipo penal de falsedad ideológica en documento público que constituye la calificación jurídica más específica y adecuada para los hechos investigados”, resaltó la fiscal del cargo.
Acto seguido, tras la pregunta del juez de control de garantías, la representante del ente investigador señaló que dejó en firme la calificación de coautoría en el cargo de falsedad en documento privado.
Con esto, el exdiputado por el Atlántico fue vinculado a un proceso penal por los delitos de interés indebido en la celebración de contratos, peculado por apropiación, tráfico de influencias, falsedad en documento público y falsedad en documento privado.
La nueva imputación de cargos tiene relación con los hechos que se habrían presentado entre junio de 2021 y 2022 cuando el entonces diputado por el Atlántico habría participado indebidamente en la celebración de contratos entre la gobernación del Atlántico y la Fundación Conciencia Social (Fucoso).
En el marco de la celebración de los convenios, que rozaron los 3.000 millones de pesos, el diputado se habría apropiado de 111 millones de pesos por su gestión para la entrega de estos contratos que tenían como objetivo programas sociales destinados a adultos mayores y población vulnerable.
Este proceso se suma al que se adelanta contra Nicolás Petro Burgos por los delitos de lavado de activos y enriquecimiento ilícito de funcionario por los hechos registrados en marzo de 2022.
En esa oportunidad, el diputado habría recibido altas sumas de dinero en efectivo por parte del exnarcotrasficante Samuel Santander Lopesierra, conocido como El Hombre Marlboro; y el empresario Gabriel Hilsaca.
Este dinero fue utilizado -según las pruebas señaladas en la acusación- para la compra de un lote en un exclusivo sector de Barranquilla, así como para la adquisición de una camioneta y ropa de diseñador (Salvatore Ferragamo y Carolina Herrera), además del pago de deudas.
Este caso, cuya testigo clave es Day Vásquez, se encuentra en preparatoria de juicio, es decir, el juez está definiendo las pruebas documentales, testimoniales y técnicas que serán tenidas en cuenta para la etapa posterior.