Pese a que el fenómeno de El Niño se venía anunciando desde mucho tiempo atrás, antes de su entrada oficial al territorio, como un evento climático que tendría una crudeza alta, el coletazo que está causando en distintas ramas de la economía ya se empieza a ver.

El riesgo es de que el efecto termine impactando el bolsillo de los colombianos, pues el encarecimiento de los precios podría darse y, de hecho, en algunos segmentos de alimentos ya ha ocurrido.

Para gran parte de los colombianos resulta demasiado costoso adquirir la carne, por ejemplo, lo que tiene una explicación relacionada con El Niño.

Según Fedegán, gremio de ganaderos de Colombia, entre el primero de diciembre y el 15 de enero, las pérdidas en la ganadería superan ya los 122.400 millones de pesos, debido a la sequía en pastizales, de los cuales se alimenta el ganado bovino.

“El efecto negativo es notoriamente impactante en tres de las zonas productivas cuya principal actividad ha sido por décadas la ganadería bovina, como son las regiones Andina, Caribe y los Llanos Orientales”, dijo José Félix Lafaurie, presidente de Fedegán, al destapar el estudio sobre el evento climático.

Ganaderos, afectados por el fenómeno de El Niño. | Foto: Fedegán

Cae producción de leche

El segmento de la ganadería, dentro del agro, tiene todo que ver con el abastecimiento de alimentos de primera necesidad. Por ejemplo, la leche, de la que además se preparan una variedad de productos esenciales para la nutrición de los hogares, tuvo una estrepitosa caída, según Fedegán.

Allí las pérdidas superarían los 105.795 millones de pesos, contando solo con las ganaderías especializadas en lechería, sostuvo Lafaurie.

En este caso, las regiones afectadas también son la región Andina, principalmente, los departamentos de Cundinamarca y Boyacá, al igual que Antioquia.

Se mueren los animales

Y la producción en el sector de la ganadería, tanto de leche como de carne, se ve mermada por las grandes afectaciones que ha traído el fenómeno de El Niño, que llevan hasta a la muerte del ganado. Así, con menos de dos meses del evento climático, habrían muerto 8.879 bovinos, según Fedegán.

Las pérdidas son cuantiosas. Los animales se mueren por insuficiencia de agua, debido a la sequía, pero también porque escasea el pasto con el que son alimentados.

Tanto así que 16 departamentos estarían en aprietos, con el déficit de alimento y agua para el ganado.

José Félix Lafaurie, presidente de Fedegán. | Foto: Revista Semana

Predios, en apuros

De acuerdo con el estudio de Fedegán, al menos unos 113.508 predios especializados en la producción de ganadería bovina en el país estarían fuertemente impactados, por lo que los costos de producción se están incrementando, debido a que los productores tendrían que estar acudiendo al traslado del ganado a otros lugares, en pos de protegerlos de la sequía y el hambre.

Ojalá lleguen las lluvias de febrero

La esperanza está cifrada en los mensajes que ha enviado el Ideam, de que en febrero habría lluvias. De lo contrario, existe la amenaza de un encarecimiento de productos alimenticios, algo que ya venía corrigiéndose en el país con el descenso de la inflación.

Precio de la leche. | Foto: Semana