La muerte de otro menor de edad en la ciudad de Valledupar volvió a consternar a sus habitantes tras el caso de la bebé que fue hallada muerta en el parqueadero de un motel hace unas semanas. Esta vez la historia conmociona nuevamente por el grado de responsabilidad que tendrían los padres del menor en todo lo ocurrido, pues el niño fue maltratado hasta el punto de perder la vida.
Los hechos son confusos y las autoridades policiales y CTI de la Fiscalía General de la Nación ya adelantan la investigación para establecer lo ocurrido con el bebé de tan solo tres meses y 29 días.
El caso se presentó exactamente el día sábado y a las 6:30 de la tarde el menor fue llevado a un centro asistencial, pero solo hasta este martes se conoció a ciencia cierta qué había ocurrido con el menor y los detalles son devastadores.
Un reporte oficial al que tuvo acceso SEMANA establece que el bebé ingresó al centro médico con evidentes hematomas en múltiples partes del cuerpo (piernas, abdomen, espalda, cabeza), “hematoma en región parietooccipital derecha y fractura en región parietooccipital derecha, lo que conlleva a su deceso hospitalario”, se lee en el informe.
Familiares y ciudadanos vecinos llevaron al menor hasta el hospital Rosario Pumarejo de López. Inicialmente se había difundido que este, además de los golpes, habría sido víctima de violencia sexual, pero desde el mismo centro hospitalario descartaron signos en su cuerpo que indicaran la situación y explicaron que deberá evaluarlo Medicina Legal.
“Estamos hablando de un lactante menor masculino de tres meses... Fue traído por sus padres y una red de apoyo al hospital en una parada cardiorrespiratoria y se pudo identificar un politraumatismo con trauma craneoencefálico severo y múltiples lesiones en los tejidos blandos”, dijo Angélica María Díazgranados, líder de la Unidad Funcional Materno Infantil.
Según Díazgranados, debido a las condiciones en las que llegó el menor y que las lesiones que padecía no fueron muy concluyentes, el equipo médico diagnosticó maltrato infantil y ante la hipótesis sobre un presunto abuso sexual dijo: “Eso ya es una definición que haría Medicina Legal en todo su contexto, pero desde la instancia de historia clínica y lo revisado no identificó lesiones que hayan descrito dentro del examen pericial médico de lesiones externas de violencia sexual”.
Sin embargo, los hechos relatados por su madre, a quien las autoridades identificaron como Viviana Arenas López, ese día salió para la tienda y dejó el niño al cuidado del papá y cuando volvió lo encontró en esas condiciones.
“Pasados unos 5 minutos ella llega y él le manifiesta que el niño se estaba ahogando por una gripe que presenta, y al preguntarle que por qué el niño presentaba esos golpes, este le aduce que al toser mucho se quedó sin aire y él le brindo los primeros auxilios, ya que tenía conocimiento y le prestó los primeros auxilios al ver que se estaba ahogando; se lo entrega a su progenitora y lo traslada hasta el hospital antes mencionado”, se lee en el informe conocido por SEMANA.
Hasta el momento se conoció que el niño ya había sido atendido en el hospital por dificultades respiratorias, pero nunca por maltrato.
Otro caso en el que murió una menor
La triste historia que enlutó y conmocionó al país el pasado primero de enero, cuando se conoció la muerte de una bebé de apenas 7 meses dentro de un motel en la ciudad de Valledupar, cuando su madre se encontraba al interior de una habitación junto a un hombre, ha dado un giro drástico con el paso de los días y los avances de la investigación. La historia parece ser otra.
Después de que el caso se hizo público, las autoridades dispusieron toda su capacidad a esclarecer lo ocurrido. Posteriormente se conoció que quien estaba junto a la madre de la menor era también el padre de la pequeña y que habían estado juntos compartiendo para luego llegar al sitio donde ocurrieron los hechos.
SEMANA conoció las imágenes inexplicables, hasta ese momento, de cómo fueron encontradas las dos personas al interior de la habitación número 111 del motel Santa Bárbara, ubicado en la carrera 7 # 43-103 del barrio 12 de Octubre de esta ciudad.
Los jóvenes en las imágenes son María Camila Mengual Mojica y Humberto Manuel Olivilla Pineda, ella de 19 años, y él de 23. Estaban inconscientes, aparentemente borrachos y con signos de haber consumido sustancias psicoactivas.
Desde ahí, las especulaciones sobre la responsabilidad de la muerte de la menor de edad fueron muchas, pero todo cambiaría con los últimos detalles de la investigación.
Se conocieron detalles de la investigación en la que los elementos probatorios arrojarían que su padre, Humberto Manuel Olivilla Pineda, sería el principal responsable del lamentable hecho. E incluso fue emitida una orden de captura en su contra, desde el pasado jueves, según fuentes de la Fiscalía.
La hipótesis apunta a que la joven madre habría llegado bajo amenazas con arma traumática a ese sitio, e incluso Humberto la habría obligado a dejar a la bebé dentro del carro.
Entre los relatos que tienen de los testigos, al parecer, cuando nació la pequeña, su padre Humberto no la quiso reconocer como su hija legítima y fue el motivo principal por el que María Camila se habría ido a vivir con su madre a la capital del Cesar, pero ese día el hombre llamó para decir que quería ver a la niña.
María Camila accedió a encontrarse con Humberto y fue allí cuando estando con ella sacó el arma y la llevó hasta el motel. La joven quiso sacar a la menor del carro, pero él la obligó con amenazas a que la dejara dentro del vehículo y la obligó también a sostener relaciones sexuales.
Por estos hechos, el joven fue señalado de los delitos de secuestro, acceso carnal violento y homicidio por posición de garante. En estos momentos es buscado por las autoridades. Se espera que este lunes el fiscal general de la Nación, Francisco Barbosa, entregue más detalles.