El expresidente Álvaro Uribe se refirió a la decisión que reveló SEMANA sobre su llamado a juicio, tras la negativa de precluir su proceso, por lo que la Fiscalía debe proceder con una acusación.

A través de sus redes sociales, el exmandatario hizo referencia a la decisión que se conocerá este viernes 6 de octubre a las 2:00 de la tarde. “Me niegan la preclusión y ordenan llevarme a juicio”, dijo Uribe.

Además, convocó a una rueda de prensa en Cartagena para entregar más detalles de lo que ocurrirá en la diligencia de este viernes. “Sobre la noticia de @RevistaSemana de que me niegan la preclusión y me llaman a juicio, haré unas referencias en Cartagena, ciudad donde participo en un foro de seguridad”.

Esta noticia se trata de un hecho inédito en la historia reciente del país, y se dará por orden del Tribunal Superior de Bogotá, en medio del proceso que se le sigue al exmandatario por presunta manipulación de testigos y fraude procesal.

Luego de varios meses, los magistrados tomaron la decisión que será pública mañana en la audiencia a la que está citado el exmandatario, a las 2 de la tarde, donde el Tribunal Superior de Bogotá ratificará la decisión del juzgado 41 penal de conocimiento de no precluir el proceso.

Álvaro Uribe | Foto: Colprensa

SEMANA conoció que la Fiscalía, aunque tiene un plazo para presentar el escrito de acusación contra el presidente Uribe, una vez se conozca el fallo, presentará este documento para llamarlo a juicio.

La decisión se tomará tras cinco meses de estudio, con ponencia del magistrado Carlos Andrés Guzmán Díaz. Para la diligencia judicial están convocados el expresidente Uribe y sus abogados, los reconocidos penalistas Jaime Granados y Jaime Lombana, así como el senador Iván Cepeda Castro; el exfiscal general Eduardo Montealegre; el exvicefiscal general Jorge Fernando Perdomo Torres, y Deyanira Gómez, exesposa de Juan Guillermo Monsalve, quienes fueron avalados como víctimas dentro de este expediente.

Se trata de un caso atípico, en medio del cual el expresidente Álvaro Uribe pasó, de forma insólita, de denunciante a acusado. El exmandatario había acusado a los congresistas Iván Cepeda y Piedad Córdoba de ir a las cárceles buscando testimonios en su contra.

Sin embargo, este proceso fue cerrado y, de forma sorpresiva, Uribe fue sentado en el banquillo de los acusados, no sin que se siguieran presentando situaciones extrañas, como el hecho de que la Corte Suprema de Justicia hubiera ordenado la interceptación de su teléfono, en una supuesta confusión con el número del también congresista Nilton Córdoba.