Las latitudes medias de los océanos Pacífico Norte y Atlántico Norte, partes del Océano Índico Norte y la costa de Asia Oriental presentan los mayores riesgos ecológicos por contaminación plástica.

Científicos de la Universidad de Tulane publicaron la primera evaluación global sobre una amenaza de las amenazas ambientales más acuciantes del planeta: la acumulación de plástico en los océanos.

El estudio reveló que las zonas de mayor riesgo no siempre son las “manchas de basura” donde los plásticos se acumulan visiblemente, sino a menudo lugares donde estos se superponen con una densa vida marina y contaminantes. Esto significa que incluso las aguas con niveles de plástico relativamente bajos pueden enfrentar graves amenazas ecológicas.

Científicos han descubierto que gran parte del plástico oceánico permanece como nanoplásticos imperceptibles. | Foto: Carmen Martinez Torron

El estudio, publicado en Nature Sustainability, va más allá de medir dónde se acumulan los plásticos. En su lugar, mapea los “puntos críticos de riesgo ecológico” a nivel mundial mediante la evaluación de cuatro vías principales de daño para la vida marina: ingestión, enredo, transporte de contaminantes tóxicos y lixiviación de sustancias químicas nocivas a medida que los plásticos se descomponen.

“La contaminación plástica en el océano es ampliamente reconocida como una preocupación mundial, pero los riesgos ecológicos que representa siguen siendo poco conocidos”, afirmó Yanxu Zhang, autor principal del estudio y profesor asociado de Ciencias de la Tierra y Ambientales en la Facultad de Ciencias e Ingeniería de Tulane. Queríamos cubrir esta brecha de conocimiento evaluando sistemáticamente cómo interactúan los plásticos con la vida marina y los ecosistemas a través de múltiples vías de riesgo.

El equipo utilizó métodos computacionales recientemente desarrollados para evaluar el riesgo. Al integrar modelos globales de plásticos oceánicos, la distribución de especies marinas y los niveles de contaminantes, crearon un nuevo marco integral para evaluar las amenazas ecológicas.

Los hallazgos resaltan la necesidad de priorizar la limpieza y la prevención no solo en áreas con acumulación visible de plástico, sino también en regiones donde la vida marina es más vulnerable, afirmó Zhang.

El equipo utilizó métodos computacionales recientemente desarrollados para evaluar el riesgo. (Imagen de referencia). | Foto: Getty Images

Aparejos fantasma

Las zonas de alto riesgo incluyen las latitudes medias de los océanos Pacífico Norte y Atlántico Norte, partes del Océano Índico Norte y la costa de Asia Oriental. Las aguas ricas en nutrientes con abundante vida marina aumentan el riesgo en algunos casos, incluso cuando los niveles de plástico no son los más altos. Las áreas costeras cercanas a zonas de pesca concurridas son particularmente vulnerables a los peligros de enredo causados por “aparejos fantasma”, el término que se refiere a los aparejos de pesca abandonados en el agua, como redes de enmalle, trampas, sedales y redes de arrastre.

El estudio también identificó el papel de los plásticos como una “banda transportadora” de contaminantes como el metilmercurio neurotóxico y los llamados “químicos permanentes” (PFOS), dos contaminantes que pueden acumularse en las redes tróficas marinas y amenazar la salud humana. Los riesgos son mayores en las regiones donde los plásticos contaminados tienen mayor probabilidad de ser ingeridos por organismos marinos.

De cara al futuro, los investigadores modelaron escenarios futuros basados en diferentes niveles de reducción de residuos plásticos. Sin una acción global más contundente, el riesgo de ingestión podría aumentar más del triple para 2060. Sin embargo, los esfuerzos coordinados para reducir el uso de plástico y mejorar la gestión de residuos, especialmente en regiones en rápido desarrollo, podrían reducir sustancialmente las amenazas.

“Al mapear la distribución global de los riesgos ecológicos relacionados con el plástico, proporcionamos una base científica para orientar las prioridades de limpieza de los océanos y la formulación de políticas”, afirmó Zhang.

“Este trabajo llega en un momento crucial, ya que el mundo está negociando un tratado global sobre el plástico, y esperamos que nuestros resultados puedan ayudar a orientar las intervenciones donde tengan el mayor impacto”, añadió.

*Con información de Europa Press.