Los riñones son clave en el funcionamiento del organismo. Se encargan de eliminar los desechos y el exceso de líquido del cuerpo, a la vez que expulsan el ácido que producen las células del cuerpo y mantienen un equilibrio saludable de agua, sales y minerales como sodio, calcio, fósforo y potasio en la sangre.
Sin este equilibrio es posible que los nervios, los músculos y otros tejidos en el cuerpo no funcionen normalmente, explica el Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y Renales de Estados Unidos.
Es frecuente que las personas experimenten algún tipo de dolor renal, que la mayoría de las veces es ocasionado por una infección en los riñones o un cálculo en los conductos que salen de este.
Si el dolor proviene del riñón se siente específicamente en el costado, que es el área a cada lado de la columna entre la parte baja de la caja torácica y las caderas. Usualmente ocurre en un lado del cuerpo, pero puede presentarse en ambos, explica el portal especializado Healthline.
El dolor renal usualmente es agudo si la persona tiene un cálculo renal y un dolor sordo, si proviene de una infección. Si el paciente está expulsando un cálculo renal, el dolor puede variar a medida que el cálculo se mueve.
Normalmente, según el portal de salud Tua Saúde, los medicamentos para el dolor en los riñones, que suelen ser indicados por el nefrólogo, son analgésicos, antiinflamatorios o antiespasmódicos, como paracetamol, ibuprofeno o escopolamina, pues permiten reducir la inflamación y la contracción de las vías urinarias.
No obstante, existen algunos remedios naturales que pueden ayudar a minimizar la molestia.
Beber agua: Tomar agua es una de las maneras más fáciles de prevenir y tratar los dolores renales, especialmente los causados por los cálculos. Los expertos en salud recomiendan beber unos ocho vasos de agua por día. Si se consume más de esta cantidad, esto puede facilitar la eliminación o retardar el crecimiento de depósitos en los riñones, según indica Medical News Today.
Jugo de apio: Tiene propiedades antisépticas que permiten la eliminación de las bacterias a través de la orina. “Es un jugo bastante efectivo para aquellas personas con infecciones urinarias recurrentes, cálculos renales y para personas mayores”, de acuerdo con una publicación del portal Mejor con Salud.
Jugo de limón: Los limones contienen citrato, un compuesto que ayuda a descomponer los depósitos de calcio y retardar su crecimiento. Dos vasos de 5 onzas, el primero con el estómago vacío a primera hora de la mañana y otro unas pocas horas antes de la cena, pueden ayudar a deshacer los cálculos más pequeños.
Albahaca: Esta planta contiene compuestos que pueden ayudar a estabilizar los niveles de ácido úrico, lo que dificulta la formación de cálculos renales. Además, contiene ácido acético, un químico conocido por ayudar a disolver los cálculos. Una cucharadita de extracto de albahaca o jugo puro al día ayudaría a prevenir y tratar los cálculos renales.
Vinagre de sidra de manzana: Este también contiene ácido cítrico que puede ayudar a disolver los depósitos de calcio. Dos cucharadas de vinagre de manzana puro mezclado con 8 onzas de agua pueden reducir los síntomas de los cálculos renales y prevenir su desarrollo, según Medical News Today. Esta mezcla se puede beber varias veces al día y puede ser más efectiva cuando se consume antes de las comidas.
Aceite de oliva extra virgen: Este aceite es espeso y rico que puede facilitar la eliminación de los cálculos renales al lubricar el tracto urinario. Un vaso de 5 onzas temprano en la mañana y otro al final de la tarde, puede reducir el dolor y la incomodidad.
Extracto, té o jugo de diente de león: Esta planta contiene compuestos que incrementan la producción de bilis y orina, lo que ayuda a eliminar los desechos del cuerpo. La recomendación de los expertos es tomar diariamente de 3 a 4 tazas en forma de té o jugo.
Jugo de sandía: Es aconsejable para paliar el dolor renal por su alto contenido en agua y potasio. Esto desintegra los cálculos de fosfatos y calcio. Por otro lado, estimula la eliminación de toxinas por la orina debido a sus propiedades diuréticas.
El consumo de té a base de semillas de sandía tres veces por semana también ofrece propiedades analgésicas para el tratamiento del dolor agudo de los riñones.
Si bien estos remedios pueden ser recomendados para aliviar los dolores renales, no son tratamiento por lo que es importante que el paciente consulte al médico para seguir sus indicaciones.