Sufrir de insomnio o tener dificultad para dormir en las noches es un padecimiento que tienen muchas personas hoy en día. Además, de acuerdo con el portal experto, Mayo Clinic, este malestar puede traer otro tipo de complicaciones con el tiempo: cuando una persona no logra descansar las horas recomendadas, presenta episodios de estrés, frustración e irritabilidad.

“El insomnio no solo reduce la energía y el estado de ánimo, sino que afecta la salud, el desempeño laboral y la calidad de vida”. Las horas de sueño propicias para cada persona varían, según la edad y las condiciones de cada paciente; sin embargo, el portal menciona que lo recomendado para los adultos mayores es dormir entre siete y ocho horas, durante la noche y de manera consecutiva.

La mayoría de los adultos experimenta insomnio a largo plazo (agudo) y dura algunos días o semanas; por lo general, se presenta en pacientes que han estado expuestos a situaciones de estrés o a un acontecimiento traumático. Otros individuos sufren de insomnio a largo plazo (crónico), que dura más de un mes. Cabe mencionar que el insomnio puede ser un problema de raíz o puede estar asociado con otras afecciones o con el consumo de algún fármaco.

No obstante, en relación con el fenómeno, investigadores de la Universidad de Harvard, publicaron sus hallazgos y formaron nuevas hipótesis sobre el hecho de que las personas se mantuvieran despiertas después de la medianoche.

En ese sentido, señalaron que las personas pueden tener cambios en el cerebro cuando las personas están despiertas después de esta hora. Estos cambios pueden verse reflejados en la forma en que dichas personas interactúan con el mundo, especialmente las que están relacionadas con el control de los impulsos, especialmente las que se relacionan con el abuso de sustancias, y el juego, el procesamiento de las recompensas, entre otras cosas sin pensar en las consecuencias.

Debido a que es un malestar que afecta a muchas personas y así mismo afecta sus actividades diarias, el diario El Comercio en su sección de salud brinda una lista de alimentos que se pueden consumir para evitar el insomnio, como otros que pueden agudizar el síntoma.

Alimentos que se deben evitar

  • Café, té, bebidas con un alto contenido de azúcar, gaseosas y productos estimulantes como energizantes o productos que contengan cafeína: los profesionales de la salud recomiendan que el último café del día se consuma antes de las siete de la noche y las bebidas gaseosas y azucaradas no deben consumirse dos horas antes de dormir.
  • Carbohidratos: estos productos, por lo general, generan pesadez; por ende, consumirlos de noche puede perjudicar lo que se conoce como sueño profundo, debido a que el sistema digestivo está trabajando en procesar lo que se consumió más no en descansar.

Alimentos que se pueden consumir

  • Productos que contengan vitamina A y B: los alimentos que contienes estos componentes aumentan los niveles de magnesio en el cuerpo; este “interviene en el GABA, un neurotransmisor inhibidor del sistema nervioso central que permite tener un sueño profundo”.
  • Espinacas, zanahorias y guisantes: “estas verduras contienen vitamina B6. Por ende, evitan la llenura y dejan el cuerpo ligero para ir a descansar”.