La gran estafa

Se ha presentado recientemente una ola de estafas telefónicas en Bogotá. Una mujer que dice ser Patricia de Cisneros, la esposa del magnate venezolano Gustavo Cisneros, ha llamado a diferentes pesos pesados de la clase dirigente colombiana para pedir ayuda para un sobrino que estaría encarcelado injustamente en una prisión del país. Ante la importancia de su supuesto marido, varios de sus interlocutores se han comido el cuento. Cuando se gana su confianza, la señora pide entre 10 y 15 millones de pesos para la causa, mientras se desplaza un equipo venezolano a Colombia para manejar la situación al más alto nivel jurídico y político. Asegura que el dinero será reembolsado en pocos días. Los que han caído le entregaron un cheque a un mensajero antes de enterarse de que todo era una estafa.