Delito de cuello blanco

El fraude en las empresas privadas se ha vuelto más frecuente de lo que se piensa. En el último Reporte de Fraude Global que acaba de revelar la compañía Kroll, se muestra cómo ha crecido este delito de cuello blanco en todo el mundo. Una de las conclusiones de la investigación, que se realizó con base en encuestas a 700 altos ejecutivos de las principales compañías a nivel global, es que casi nadie está exento de sufrir un fraude por parte de sus empleados: el 85 por ciento de los entrevistados reconoció haber sido víctima de estas prácticas. Además, las pérdidas promedio para cada empresa aumentaron de 8,2 millones de dólares, según la encuesta del año pasado, a 8,8 millones de dólares este año. Las crisis económicas hacen que aumenten los riesgos de fraude, pues las compañías en el momento del ajuste relajan los controles internos. Se destaca que uno de los frentes donde mayor espacio hay para el fraude es en el robo de propiedad intelectual.