Especiales Semana

ARTE

27 de febrero de 1989

No se trata en absoluto de pintar pajaritos de oro, pero en lo que tiene que ver con el mercado del arte, los expertos dicen que las cosas van viento en popa. No sólo la base de compradores se ha venido ampliando, sino que continúan apareciendo nuevas figuras que, según los criticos, tienen mucho futuro.

La llegada de las nuevas generaciones ha hecho que hoy haya obras para todos los gustos y bolsillos.
Aunque en este mercado siempre es bueno tener alguna idea del tema o asesorarse bien, los más optimistas dicen que la coyuntura de 1989 es especialmente buena. "Este será el mejor año para el arte", dice Julio Viana, un experto de Medellín. Esta opinión es compartida por muchas personas. Aun los más parcos creen que el arte es una excelente alternativa debido a que, por lo menos, protege a su comprador de la inflación.

No obstante, es obvio que ni todos los artistas son iguales, ni todas las obras de esos artistas se cotizan por el mismo precio. Por esa razón, podrían establecerse criterios que pueden ayudar a aclarar el panorama. Según éstos, lo mejor es dividir a los artistas en generaciones.

En el grupo de los tradicionales se encuentran Edgar Negret, Alejandro Obregón, Augusto Ramírez Villamizar, Fernando Botero, Antonio Roda y Jim Amaral. Según una especialista, la mayoria de las obras de estos pintores se encuentran en un rango de 50.000 a 250.000 dólares. En opinión de la fuente, este grupo ha tenido fuertes incrementos en los años pasados y debe continuar con fuerza durante unos cuantos más. No obstante, se cree que a mediano plazo los precios van a tender a especializarse.

La siguiente categoría le corresponde a los artistas de la generación de los 70. Dentro de ésta se ubican Beatriz González, Luis Caballero, Santiago Cárdenas, Ana Mercedes Hoyos, Manuel Hernández, María de la Paz Jaramillo y Darío Morales. Para este grupo, los precios se ubican entre 10.000 y 50.000 dólares, y se consideran atractivos por su proyección de largo plazo. Mención especial merece la obra de Darío Morales, el cartagenero fallecido el año pasado, cuyos precios se duplicaron y alcanzan fácil mente la cota de los 100.000 dólares.

Finalmente, se encuentra el grupo de los más jóvenes, en el cual el riesgo es mayor, pero donde hay posibilidad de amasar las mayores ganancias.
Dentro de éste hay que mencionar a Ronny Vayda (escultura), Becky Mayer (fotografía), Ana María Rueda, Alberto Sojo, Patricia Tavera, Víctor Laignelet, Saturnino Ramirez, Elsa Zambrano, Diego Mazuera, Gustavo Vejarano, Carlos Salazar, Mario Ossaba, María Teresa Vieco, Luis Fernando Zapata, Ofelia Rodríguez y María Cristina Cortés, entre otros.
Los precios de las obras de éstos se ubican entre los 1.000 y 10.000 dólares, dependiendo de la trayectoria del artista y de la obra en particular.

Todo ese rosario de nombres confirma la fortaleza del mercado del arte en el país. Aunque para el grueso público ésta es un área desconocida, las cifras descritas indican que en este campo en particular, Colombia no sólo tiene mucho pasado, sino también mucho futuro. -