Especiales Semana

SEÑORITA PRESIDENTE

Es muy probable que la ex Miss Universo Irene Sáez sea la próxima Presidente de Venezuela. SEMANA la entrevistó

13 de octubre de 1997

Si en las proximidades del año 2000 Colombia y Venezuela volvieran a verse enfrentadas a un incidente como el de la corbeta Caldas, que estuvo a punto de originar un conflicto de grandes proporciones entre los dos países en 1987, es posible que quien esté al frente de las Fuerzas Armadas venezolanas como comandante en jefe sea una ex reina de belleza. Aunque parezca increíble, si las elecciones en Venezuela fueran hoy Irene Sáez, Miss Universo 1981, sería sin duda alguna la sucesora de Rafael Caldera en el Palacio de Miraflores. Con su melena rubia, un lenguaje franco y sencillo y una calidez que la desborda, la hoy alcaldesa de Chacao tiene conquistados a los venezolanos y a medio mundo. A su despacho en el corazón del distrito financiero de Caracas llegan todos los días periodistas de los más remotos rincones del planeta que quieren tratar de entender cómo es que esta bella mujer de escasos 36 años, sin apoyo de las maquinarias, sin programa y sin una organización política sólida, lleva tres años punteando prácticamente todas las encuestas en Venezuela. Irene _a secas, como la llaman sus seguidores_ ha estado en las pantallas de la televisión rusa, de la australiana, de la alemana, en los programas El show de Cristina, Ocurrió así y América habla de las cadenas hispanas de Estados Unidos y ha ocupado la primera plana de publicaciones como Le Monde y Le Figaro.Y no es para menos. Irene Sáez tiene conmocionada a Venezuela. Unos la admiran, otros la critican y otros más la desprecian, pero todos se preguntan cómo una reina de belleza puede haber llegado tan lejos y estar ahora en el primer lugar de las encuestas. Según el sondeo más reciente realizado en Venezuela, si las elecciones fueran este año la ex Miss Universo arrasaría a todos sus posibles contendores. En la encuesta, efectuada en agosto último por la firma Datanálisis y aún inédita en Venezuela, a la pregunta de por quién votarían si las elecciones para la Presidencia de la República fueran hoy, el 44,8 por ciento de los venezolanos respondió que por Irene Sáez. De lejos la siguen quien muy posiblemente será el candidato de Acción Democrática y su principal contrincante, Claudio Fermín, con el 13,1 por ciento, y el coronel Hugo Chaves, líder del fallido intento de golpe del 27 de noviembre de 1992 con el 11,7 por ciento. ¿Qué ha convertido a esta mujer que hasta hace unos años era solamente una ex Miss Universo linda, simpática y con ganas de hacer cosas por los demás, como todas las Miss Universo, en un fenómeno político de talla mundial?La historia comenzó hace 16 años, un 20 de julio, precisamente cuando Irene Sáez Conde fue elegida en el Carnegie Hall de New York como Miss Universo 1981. Un año recorriendo el mundo, conociendo jefes de Estado, personajes del jet set, modistos, periodistas y políticos, y estrechando la mano de miles de personas que querían admirarla de cerca fueron el detonante para que empezara a transformarse en la bomba electoral que es hoy. A partir de ese momento esta caraqueña, que entonces tenía 19 años, dejó de ser la menor de los seis hijos de una tradicional familia de clase media para convertirse en la mujer más admirada y envidiada de su país. Como tal estuvo en los hogares de los venezolanos día tras día a través de la televisión o de la prensa. Con ello, casi sin proponérselo, logró uno de los objetivos más codiciados por cualquier político: hacerse conocer. Si Irene Sáez se hubiera quedado allí muy posiblemente hoy sería querida y recordada por todos los venezolanos, como lo son sus coterráneas y también Miss Universo Maritza Sayalero, Bárbara Palacios o Alicia Machado, pero no estaría a las puertas del palacio presidencial. Lo que constituyó el germen de lo que es hoy Irene Sáez fue el proceso que poco a poco se fue dando dentro de ella misma. El reinado no sólo le abrió los ojos al mundo sino también a lo que ella podía llegar a ser si se lo proponía. Huérfana de madre desde los tres años, había crecido independiente y luchadora. Sin embargo fue el reinado el que le dio la fuerza y la seguridad necesarias para salir a conquistarlo todo. A pesar de las tentadoras ofertas que le hicieron de modelaje y actuación Irene decidió regresar a su país y estudiar ciencias políticas en la Universidad Central de Venezuela. Poco tiempo después aceptó convertirse en la imagen del Banco Consolidado, por entonces uno de los más prestigiosos del país. Su nuevo papel la llevó otra vez a estar presente en medio de las familias venezolanas, que continuaron viéndola diariamente en los periódicos o la televisión, codeándose con los personajes más destacados de la vida nacional. De sentirse linda empezó a sentirse importante.
De Chacao a Miraflores
Sin embargo sólo fue en 1992 cuando le propusieron ser candidata a la alcaldía del recién creado municipio de Chacao que se despertó el animal político que dormía en su interior. No tuvo que pensarlo mucho para aceptar. Fue así como con el apoyo de los dos partidos tradicionales, Acción Democrática _AD_ y Copei, y el de la mayoría de los habitantes de Chacao, conquistó su segundo trono. Desde él a su imagen de mujer dulce y bondadosa comenzó a sumarle la de una ejecutiva moderna y eficiente, con don de mando, capaz de poner a marchar como un relojito el municipio de Chacao _donde viven y trabajan la mayoría de los venezolanos importantes_ y además de seguir conquistando el cariño de la gente (ver recuadro). El éxito de su gestión en Chacao _que en 1995 volvió a elegirla como su alcaldesa_ terminó de transformar a Irene. De niña buena y bonita se convirtió en mujer talentosa y capaz. Las encuestas empezaron a mostrarla como uno de los personajes más populares en Venezuela y pronto dejó atrás a los más experimentados políticos. Con el éxito llegaron también las críticas. Para algunos la popularidad de Irene no pasa de ser la de cualquier producto inflado por los medios. Para otros obedece a una cuidadosa labor de maquillaje orquestada por la propia Irene, la cual se siente predestinada a ser la redentora de Venezuela. Unos más piensan que Venezuela no es Chacao y que sus logros al frente del municipio no son credencial suficiente para aspirar a la Presidencia de la República. Finalmente hay quienes consideran a Irene puro empaque sin contenido y le critican el no tener propuestas para solucionar los problemas de Venezuela. En todo esto hay algo de cierto. Pero también lo es que mantener un globo inflado y en lo más alto del firmamento durante cinco años sin algo sólido que lo sostenga habría sido imposible. ¿Qué es entonces lo que ha convertido a esta ex Miss Universo en la mujer que la mayoría de los venezolanos quieren hoy como gobernante? La respuesta es: una mezcla entre belleza, talento, audacia y oportunidad. Irene Sáez ha logrado proyectarse como una figura independiente, limpia, que habla poco, pero que es capaz de mostrar resultados que los políticos tradicionales no han sido capaces de conseguir, lo cual la ha convertido en el símbolo de la antipolítica. Pero además ha surgido en medio de una Venezuela convulsionada, que viene de sufrir un gran descalabro económico y político. Desde los violentos disturbios del 'Caracazo' en 1989 Venezuela ha pasado por dos intentos de golpe de Estado, la destitución de un presidente, la atomización de sus partidos, un debilitamiento institucional sin precedentes y una crisis económica que la han dejado anímicamente agotada y con la confianza desgastada. Es un hecho que Irene es un fenómeno político. Pero también lo es que en una Venezuela con partidos políticos fuertes y líderes capaces muy posiblemente Irene Sáez no habría pasado de ser la bella y eficiente alcaldesa de un municipio de 200.000 habitantes. Paradójicamente la misma crisis que ha contribuido a dispararla en las encuestas podría ser la que lograra detenerla. Así como hay quienes piensan que ella es la única persona capaz de salvar a Venezuela hay quienes creen que elegirla a ella para manejar la crisis sería un error inimaginable. Sin ser experta en tema alguno, sin experiencia pública distinta a la de administrar Chacao y sin un programa definido de gobierno, Irene significa para algunos un gran salto al vacío. Derrotar a Irene, sin embargo, no va a ser fácil. Sobre todo porque no es un político cualquiera sino un mito político, y como tal está asociada con la emoción, no con la razón, y se expresa a través de imágenes, no de conceptos. Mientras los principales contendores de Irene, como Claudio Fermín (AD) y Eduardo Fernández (Copei) están desesperados tratando de construirse una imagen de estudiosos y de estadistas, la ex Miss Universo no necesita de ello. Puede decir con tranquilidad que aún no tiene un programa de gobierno o evadir las respuestas sobre temas que no conoce sin que eso la afecte dentro de quienes la apoyan. Irene apela no a la racionalidad de los venezolanos sino a su emotividad, a su necesidad de una figura joven, dinámica, incontaminada y que les abra la puerta hacia un futuro diferente. Es esto precisamente lo que convierte en ilimitadas las posibilidades de crecer de Irene Sáez y condiciona las de sus contrincantes, que siguen pretendiendo combatirla con argumentos o con programas.

Los contrincantes
Aunque la campaña presidencial está apenas en sus albores y aún es muy temprano para predecir qué pasará en diciembre de 1998, parece inevitable que los partidos políticos tradicionales lleguen divididos a esas elecciones. Acción Democrática ya sufrió su primera división cuando la caída de Carlos Andrés Pérez, quien ahora en libertad y sin ataduras encabeza un movimiento denominado Apertura, cuyo propósito principal parece ser lograr un espacio en el Congreso. En este momento AD se encuentra fraccionado entre quienes están a favor de la candidatura del por muchos años secretario general del Partido Luis Alfaro Ucero, considerado el dueño de la maquinaria adeca, y quienes apoyan al ex alcalde de Caracas Claudio Fermín. Aunque el primero cuenta con el apoyo de los militantes del partido, es el segundo quien cuenta con mayor acogida dentro de la opinión. A pesar de que Irene triplica con creces a Fermín en las encuestas, él, Hugo Chaves _el ex coronel de la Guardia Nacional que intentó derrocar a Pérez en 1992_ y el ex gobernador de Carabobo Henrique Salas Romer figuran hasta ahora como los únicos candidatos que sobrepasan el 10 por ciento en los sondeos. Este hecho favorece aún más a Irene pues hay quienes piensan que sin ella se fortalecería Chaves como única opción antipartidos. Si por AD llueve en Copei no escampa. Mientras todo indica que el ex presidente Luis Herrera Campíns y el secretario general Donald Ramírez buscarán modificar los estatutos del partido para que Irene pueda ser candidata de Copei, 'El Tigre' Eduardo Fernández se opone rotundamente a que la linda advenediza le quite el turno que él cree le corresponde de ser el candidato copeyano. Los partidos minoritarios, como el MAS y la Causa R, también tienen profundas divisiones internas. En cuanto a Convergencia, si bien es cierto que finalmente el presidente Caldera logró estabilizar su gobierno y empezar a alejar el fantasma de la crisis, también lo es que no logró consolidar a Convergencia como un partido político. Es por esto que es muy posible que no tenga candidato propio en las próximas elecciones y busque más bien un escampadero, que muchos aseguran serán las toldas de Alfaro Ucero, a quien Caldera le debe el haberlo apoyado en los momentos más difíciles de su gobierno.
En medio de este confuso panorama político lo único claro es que Irene será candidata. Muy posiblemente en la convención de Copei de esta semana se llegue a una fórmula que le abra el camino para ser la candidata del partido. Sin embargo ella preferiría contar con el apoyo de los copeyanos sin tener que matricularse. Por si acaso, ya fundó su propio partido, Irene (Integración, Renovación, Nueva Esperanza), alrededor del cual espera crear una organización política nacional si lo de Copei no funciona. Su contrincante sin duda alguna será quien resulte elegido candidato de AD. Aunque muchos aseguran que será Ucero, hay quienes hilan más delgado y sostienen que lo que Ucero _un experimentado político_ busca es acumular alrededor suyo todo el poder de AD para después endosárselo, con cuenta de cobro incluida, a Claudio Fermín. ¿Cuáles son entonces las posibilidades de que Irene Sáez sea la próxima Presidente de Venezuela? Si las cosas siguen como van, muchas. Sin embargo quienes conocen de cerca la política venezolana aseguran que, si lo consigue, no será fácilmente. Primero que todo porque en un país machista como Venezuela, ni siquiera las mujeres a pesar de ser mayoría dentro del electorado están preparadas para aceptar que otra mujer sea quien lleve los pantalones en el gobierno. Tampoco las Fuerzas Armadas, según lo han manifestado ya algunos de sus miembros, parecen dispuestas a aceptar de buena gana a una ex reina de belleza como su comandante en jefe. Hay quienes aseguran incluso que si ganara no dejarían siquiera que se posesionara. Pero más allá de los argumentos machistas, el principal obstáculo para Irene parece ser la maquinaria adeca, cuyo verdadero poderío no se pone en marcha desde la elección de Lusinchi en 1984. Esa aplanadora manejada por Ucero desde hace varios años barrio por barrio y que hoy puede llegar a ser de dos millones de inscritos, dispuestos a votar con disciplina de partido. Lo que es un hecho es que hoy por hoy los venezolanos están viendo crecer con desconcierto a un verdadero monstruo político al que no saben cómo manejar ni cómo controlar. Cada día el estupor crece más entre los políticos tradicionales, que no saben cómo atajarla; los intelectuales, que no saben cómo interpretarla, y los grupos económicos, que no entienden que no busque su apoyo, y entre 20 millones de venezolanos que no saben cómo reaccionarán el día que tengan que decirle al inquilino de Miraflores "Señorita Presidente".

La Barbie de Hierro
Desde el primer año al frente de la alcaldía Irene mostró su garra. En pocos meses convirtió a Chacao en un municipio limpio, con un tránsito organizado, una policía eficiente y bajos índices de criminalidad. Pero no sólo eso. Consciente de que las cosas entran por los ojos, se empeñó también en cambiar la imagen de lo que poco a poco se convirtió en su reino. Pintó las calles, podó los prados, modernizó los parques y rediseñó los anticuados uniformes de la policía, cuyos miembros lucen ahora un sombrero explorador inglés y ropa bien cortada y transitan en unos pequeños papamóviles conocidos como 'Irenemóviles'. Con todos estos cambios Chacao pronto empezó a diferenciarse de las demás zonas de Caracas y a ser conocido como 'Irenelandia'. Una especie de paraíso terrenal en medio de las calamidades que aquejan a la mayoría de los venezolanos, donde aparentemente todo funciona. Y donde si algo anda mal, no hay que preocuparse. Lo único que hay que hacer es tomar el teléfono y marcar '1-800-IRENE' para que en cuestión de minutos llegue a donde usted necesite una patrulla de la policía. Pero no se quedó allí. La antigua Miss Universo, ahora reina de Irenelandia, empezó poco a poco a construir alrededor suyo un mito sólo comparable a lo que pudo haber sido la Evita Perón de la Argentina de los años 50. A su genuina preocupación por los más desamparados _los pobres, los ancianos, los niños_ le sumó el haber aprendido en su experiencia como reina de belleza que además de hacer cosas hay que conseguir que la gente sepa que uno las hace. Cada paso de la alcaldesa de Chacao es seguido por una corte de reporteros, fotógrafos y camarógrafos que saben que no importa qué haga, Irene Sáez tiene una capacidad infinita de convertir en espectáculo todo lo que toca. Y también en éxito. La empresa que producía las muñecas Barbie en Venezuela se dio cuenta de esa habilidad de Irene y sacó al mercado una muñeca llamada Irene, que constituye la versión tercermundista de las Barbie, a la cual promocionó con el eslogan "Irene es de verdad".A la imagen de la Irene moderna y exitosa, la propia reina le fue sumando otro ingrediente: el de santa Irene. Detrás de su escritorio la alcaldesa muestra con orgullo una docena de estatuillas de santos a quienes presenta como sus asesores de cabecera. En el pecho lleva medallas de sus santos favoritos y se preocupa por resaltar constantemente que pertenece a una organización de mujeres católicas, las Damas Salesianas, y que se encuentra profundamente comprometida con su causa. Pero además, por cuestiones del destino, en un principio y ahora quizás porque se lo ha propuesto, Irene Sáez sigue siendo soltera. Ha sido ligada sentimentalmente a varios personajes nacionales e internacionales, como el prófugo banquero José Alvarez Stelling _ex presidente del Banco Consolidado_, a Andrés Caldera _hijo del presidente venezolano_ y a Donald Trump. Estuvo a punto de casarse con el gobernador de Miranda y su principal mentor político Enrique Mendoza, pero el compromiso se rompió, según ella, porque ambos vivían demasiado ocupados. La mezcla entre soltera y devota ha convertido a Irene en una especie de virgen venezolana a la que todos veneran y a la vez desean. En palabras de un venezolano: "Mientras ella siga siendo soltera, todos somos aspirantes".

ENTREVISTA: IRENE SAEZ

"Ahora soy yo la que exploto el nombre Irene"

Semana: ¿Cómo es Irene Sáez?
Irene Sáez: Una persona de carne y hueso. Un ser humano con sentimientos y capacidades y que siente los problemas de su país.
Semana: ¿Cómo llega Irene Sáez a ser lo que es?
I.S.: Esto se lo atribuyo a que estudié en un colegio de formadores de líderes. Y a que, a los 19 años, estuve en Miss Universo. Viajé, conocí personajes como Pinochet y Reagan... Pero fui cuidadosa en no dejarme confundir. Seguí siendo sencilla.
Semana: En todo esto que usted ha vivido, ¿qué ha sido lo más difícil?
I.S.: Ir contra corriente. Ser mujer, joven, profesional y tener éxito en política es una bomba atómica. Lograr el respeto ha sido muy difícil.
Semana: ¿Cómo influyó el haber sido Miss Universo?
I.S.: Influyó mucho. El conocimiento de Irene Sáez en Venezuela es altísimo. Esto es un potencia porque nadie vota por quien no conoce.
Semana: ¿Quiere ser Presidente de Venezuela?
I.S.: Hay personas aquí que se han pasado la vida preparándose para ser presidentes y nadie cree en ellos. Yo no. Estoy sorprendida con esto que está surgiendo espontáneamente. Mira, la gente me dice: "Irene tú eres nuestra esperanza, sigue_ sigue_".
Semana: Pero la silla presidencial es un mecanismo que le daría a usted el poder para hacer lo que quiere_
I.S.: Es un mecanismo para hacer lo que la gente desea que yo haga.
Semana: La conclusión es que quiere ser Presidente...
I.S.:La decisión la voy a tomar el año próximo. Estoy preparando el camino. Pero si sigue todo como va, aquí no hay vuelta atrás.
Semana: Usted ha sido percibida como una candidata antipartidista, sin los vicios de la política. Pero, ¿cree usted que puede llegar a la Presidencia sin el apoyo de los partidos políticos?
I.S.: Soy independiente. Jamás he necesitado un partido. Soy libre en pensamiento, en acción, no le debo nada a nadie. Pero para llegar a la Presidencia hay que tener una organización que te cuide los votos Por eso ya estoy haciendo un partido para tomar las precauciones si soy candidata.
Semana:¿Copei va a apoyarla?
I.S.: Yo siento que en Copei sí hay una fuerza que quiere apoyarme.
Semana: Lo más seguro es que Copei también ponga condiciones. ¿Qué condiciones aceptaría?
I.S.: Eso no se ha planteado.
Semana: ¿Cuáles son sus fortalezas y debilidades para la Presidencia?
I.S.: La credibilidad es mi fortaleza. Y mi debilidad aparente es no haber pertenecido a una organización tradicional. Semana: ¿Estará Venezuela preparada para una mujer presidente?
I.S.: A mí me ha tocado abrir caminos y siento que en Venezuela sí hay la oportunidad de cambiar ese paradigma. Es muy difícil pero no imposible que haya una mujer presidente. Semana: Hay gente que tiene el temor de que usted se convierta en el títere de alguien_
I.S.: Eso mismo dijeron cuando me iba a lanzar para alcalde. Ni siquiera han sido creativos en sus ataques.
Semana:Dicen que usted mide cada movimiento. ¿Le aconsejan cómo vestirse, cómo peinarse?
I.S.: No, eso lo hago yo. Soy como soy y la gente me quiere así.
Semana: Hay gente que la percibe como una ególatra. Hizo una muñeca igual a usted, su partido se llama Irene.
I.S.: No, lo que pasa es que ahora soy práctica y yo me uso y me exploto a mí misma. Antes lo hacían otros.
Semana: Hay gente que dice que usted no tiene programa...
I.S.: Dicen la verdad. Lo que pasa es que ellos me ven ya como candidata y yo todavía no lo soy.
Semana: Hay sectores que no la apoyarían a usted como Presidente, entre ellos las Fuerzas Armadas
I.S.: Eso es falso. Todo lo contrario, los oficiales sacaron una página en el periódico y dijeron por qué están con Irene Sáez.
Semana: ¿Usted cree que va a tener el apoyo y la credibilidad de los grupos económicos?
I.S.: Puede haber dudas en algunos sectores, sobre todo en los que están acostumbrados a ayudar a los políticos para recibir favores.
Semana:¿De dónde saca Irene la plata para su campaña?
I.S.: Gracias a Dios hasta ahora no he necesitado sino mi trabajo.
Semana: Usted sigue soltera ¿Por qué?
I.S.: Primero, porque estuve muy cerca de casarme y la persona no me aguantó. Cuando ya me exigió "salte de la alcaldía", yo le dije: "Esto está por encima". Fue la decisión más dura porque fue el amor de mi vida. Después tuve una relación muy linda con el gobernador Enrique Mendoza, pensamos en matrimonio pero yo me involucré en mi trabajo y él en el suyo, entonces empezamos a distanciarnos.
Semana: ¿Si vuelve a enamorarse está dispuesta a casarse?
I.S.: Por supuesto.
Semana: Hay gente que dice que es una estrategia suya porque es la gran novia de Venezuela.
I.S.: Eso también es verdad. Es muy fuerte la presión para que no me case.
Semana: ¿Qué puede esperar Colombia si usted llega a la Presidencia de la República?
I.S.: Siento que el respeto mutuo va a ser la base de nuestras relaciones. Estoy segura que la cordialidad, la inteligencia, la buena vecindad y reconocernos como países hermanos siempre primará porque hay afecto. Pero no podemos negar la firmeza en nuestras decisiones. Yo tengo que defender mi gente, su seguridad, su bienestar.
Semana: ¿Qué quiere ser Irene Sáez cuando tenga 60 ó 70 años?
I.S.: Quisiera ser una abuela con una gran familia.
Semana: ¿Y ex presidente de Venezuela?
I.S.: Hace muchos años atrás.n Venezuela ha visto crecer un monstruo político que no sabe cómo manejarn Irene tiene una capacidad infinita de convertir en espectáculo y en éxito todo lo que toca.