Expertos durante el foro ‘El futuro de la salud’.
Expertos durante el gran foro ‘El futuro de la salud’. | Foto: Guillermo Torres Reina

Foros Semana

Se requiere con urgencia una política integral de medicamentos en Colombia: aquí las reflexiones de los expertos en el foro ‘El futuro de la salud’

Desabastecimiento y altos costos en importación de medicamentos, poca articulación con el Invima y la no inclusión de una política en autonomía sanitaria dentro de la reforma a la salud son algunos de los puntos claves que se mencionaron en el foro.

24 de marzo de 2023

La autonomía sanitaria, es decir la consolidación de una producción local de medicamentos, es una de las grandes necesidades que el país debe atender. Para lograrla, se necesitan la articulación entre Estado y sector privado con el objetivo de plantear una política pública sobre medicamentos, así como el desarrollo de nuevas tecnologías.

Frente al panorama de la tecnología y las barreras globales que existen para su desarrollo, Claudia Vaca, directora del centro de pensamiento Medicamentos, Información y Poder, de la Universidad Nacional, explicó durante el foro ‘El futuro de la salud’ que hay tres vacíos que suponen dificultades científicas para resolver las necesidades de países como Colombia.

“Lo primero es que no existe suficiente investigación sobre los problemas de salud en países pobres; Colombia tiene esos problemas, pues no hay vacuna contra el VIH ni interés en medicamentos para enfermedades tropicales, como la leishmania, o una vacuna contra el dengue”. Para ella, esta es una realidad sobre la que el paquete de reformas del Gobierno no tiene claridad.

Claudia Vaca, directora del centro de pensamiento Medicamentos, Información y Poder, de la Universidad Nacional.
Claudia Vaca, directora del centro de pensamiento Medicamentos, Información y Poder, de la Universidad Nacional. | Foto: Guillermo Torres Reina

El segundo vacío es la monopolización de tratamientos, tecnologías y medicamentos, que por sus altos costos dejan por fuera a una gran cantidad de pacientes en el mundo. Y en el caso de los medicamentos que no están en condición de monopolio, tienen retrasos para entrar al país en sus versiones genéricas, que en países como Estados Unidos cuestan un 50 por ciento menos. “La razón es que el Invima tarda el doble de tiempo para aprobarlos frente a otros países. Cada día que un medicamento biotecnológico no ingresa al país, cuesta 1.700 millones de pesos, de acuerdo con lo analizado por nuestro centro de pensamiento”, afirmó Vaca.

El tercer problema, agregó Vaca, es la escasez de medicamentos esenciales, una situación global que afecta directamente a Colombia: “No hay acetaminofén líquido para niños, anticonceptivos orales, ni antihipertensivos y aún no se diseña un plan de choque que resuelva esta situación”.

Avances ha habido, dice Leonardo Arregocés, profesor de economía de la salud de la Pontificia Universidad Javeriana. Según él, Colombia tiene desarrollos tecnológicos, desde tratamientos en cáncer hasta modelos de atención diferenciados de calidad, y en cuanto a la innovación en medicamentos destacó que al país le ha ido bien al “tener una gran capacidad para traer tecnologías nuevas”. “En Colombia hay prácticamente de todo, lo que no hay es porque está represado en el Invima”.

Leonardo Arregocés, profesor de economía de la salud de la Pontificia Universidad Javeriana.
Leonardo Arregocés, profesor de economía de la salud de la Pontificia Universidad Javeriana. | Foto: Guillermo Torres Reina

Durante el foro se habló también sobre la articulación entre innovación, necesidades y costos para hacer viable el acceso de medicamentos de forma diferencial a los pacientes. “Es vital rescatar el rol de la Agencia de Evaluación de Tecnologías Sanitarias (AETS), que analiza las condiciones desde diferentes aristas, como la pertinencia económica y tecnológica de los medicamentos. Como país debemos fortalecer ese ejercicio y como fabricantes de tecnologías debemos construir esos métodos”, señaló Andrés Felipe Ruiz, director de Acceso y Comercial para Centro América y Área Andina de Sanofi.

Andrés Felipe Ruiz, director de Acceso y Comercial para Centro América y Área Andina de Sanofi.
Andrés Felipe Ruiz, director de Acceso y Comercial para Centro América y Área Andina de Sanofi. | Foto: Guillermo Torres Reina

“A todas las reformas presentadas les hace falta un capítulo de medicamentos”, aseveró Claudia Sterling, vicepresidente de asuntos corporativos de Droguerías y Farmacias Cruz Verde. “Desde ambulatorios, hospitalarios, aplicación y logística de medicamentos, establecimientos farmacéuticos, droguerías móviles. Este es un mundo que no se puede regular con dos artículos. Debe ser algo estructurado, que no esté fragmentado y desarticulado”.

A su juicio, debería hablarse también de una negociación centralizada alrededor de todos los medicamentos costosos, pues, de acuerdo con un estudio de la Federación Latinoamericana de la Industria Farmacéutica (Fifarma), de 185 medicamentos innovadores que surgieron en el mundo entre 2014 y 2021, 46 llegaron a Colombia, siendo el país de Latinoamérica con más medicamentos de este tipo. Sin embargo, ingresaron a través de tutelas o costos muy altos.

Claudia Sterling, vicepresidente de asuntos corporativos de Droguerías y Farmacias Cruz Verde.
Claudia Sterling, vicepresidente de asuntos corporativos de Droguerías y Farmacias Cruz Verde. | Foto: Guillermo Torres Reina

“Hay una necesidad inmensa de tecnología sanitaria, no solo entendida desde la producción de medicamentos suficientes para satisfacer nuestra propia demanda, sino desde la materia prima. El 95 por ciento de las materias primas de los medicamentos que se elaboran en Colombia es importada, según el último estudio sectorial. La escasez de materia prima para la producción de medicamentos es real”, aseveró.

En concordancia, Vaca afirmó que la autonomía sanitaria requiere de una política pública integral y coherente que contenga información y regulación, fortalecimiento de la competencia e incentivos a la producción local; desarrollo y capacidades de producción, y suministro suficiente en zonas apartadas.

Por otro lado, sobre los elementos que destacan de la reforma de la ministra Carolina Corcho, Ruiz señaló que “lo bueno es que nos puso a hablar de salud, se creó una conciencia en la ciudadanía sobre qué tan bueno es el sistema actual. Hay un consenso sobre la necesidad de llegar a la ruralidad. Pero podemos aprender mucho de lo que ya ha sido construido en la gestión del aseguramiento para trasladar la experiencia a estos territorios”.

Por último, Arregocés resaltó que la reforma puso en el foco temas importantes: la reorganización en torno a la atención primaria y la formalización laboral del personal de salud. Lo que sucede, según él, es que muchos de esos temas no requieren reforma porque ya hay avances: “No hay que acabar con lo que ya sirve”.