LA CIFRA

Así se financia la Organización Mundial de la Salud

Donald Trump arrecia contra la Organización Mundial de la Salud (OMS), una institución que tiene un presupuesto bianual de US$4.800 millones. ¿Cómo opera la entidad encargada de coordinar la lucha global contra el coronavirus?

19 de mayo de 2020

Esta es una de las entidades que está hoy en la primera línea de batalla contra el coronavirus.

La cifra implica un aumento de 9,47% frente al presupuesto del período 2018-2019, pero se encuentra en vilo ante la amenaza del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de suspender los fondos que da su país a la Organización, al considerar que no alertó lo suficiente sobre la pandemia y que además ha estado "muy del lado de China".

El problema es que Estados Unidos es el principal financiador de la OMS, organismo que nació en 1948, después de la Segunda Guerra Mundial. El segundo mayor financiador es igualmente estadounidense: la Fundación Bill y Melinda Gates.

Según el presupuesto de la OMS, Estados Unidos aportaría una cuota de US$116 millones, tanto en 2020 como en 2021, equivalente a 24% del total aportado por los países miembros. Estos responden por 51% del presupuesto, el resto lo ponen fundaciones filantrópicas, ONG, sector privado y las Naciones de Unidas, al ser el organismo del que depende la OMS.

Sin embargo, Estados Unidos también hace contribuciones voluntarias que elevan su aporte a casi US$400 millones anuales.

El segundo país que más dinero da a la OMS es China, con US$57 millones. Le siguen Japón, Alemania y el Reino Unido. En América Latina el que más aporta es Brasil, con US$14 millones, seguido de México con US$6 millones. A Colombia le corresponde US$1 millón.

Recorte

Posibles víctimas

La suspensión de los aportes de Estados Unidos a la OMS podría tener un grave impacto en los países más pobres, que son los que más reciben ayuda de la Organización. Así mismo, se afectarían programas que hoy están siendo desplazados por la atención del coronavirus, tales como la vacunación contra enfermedades transmisibles y la construcción de sistemas de alerta temprana para tratar enfermedades como el ébola.