NACIÓN

Fuerte olor a azufre en sectores de Manizales a causa del volcán del Ruiz

Desde que se estableció la alerta amarilla, las observaciones científicas continúan mostrando inestabilidad sísmica y emisión de gases.

6 de abril de 2012
| Foto: Sistema Geológico Colombiano

Un fuerte olor a azufre se registra este Viernes Santo, por tercer día consecutivo, en algunos sectores de Manizales, ante la emisión de vapor y gases de volcán Nevado del Ruiz, informó una fuente del Observatorio Vulcanológico y Sismológico de la capital de Caldas.

La fuente del centro científico, que el pasado 31 de marzo elevo de amarillo a naranja el estado de alerta, señaló que desde el jueves el volcán "continúa mostrando inestabilidad en el comportamiento de la actividad sísmica y las tasas de emisión de gases volcánicos".

Añadió que "la sismicidad asociada al movimiento de fluidos y fracturamiento de roca dentro del edificio volcánico, ha mostrado fluctuaciones en cuanto a número y magnitud, conservando niveles como los que motivaron el cambio a naranja en el nivel de actividad volcánica".

Ese paso de la alerta amarilla a la naranja indica que la cumbre tiene una probabilidad de erupción en el "término de días o semanas".

El Observatorio, sin embargo, y ante los olores a azufre, explicó en un comunicado que "si bien esta situación no ha sido usual en las zonas más distantes del volcán, es considerada normal en el actual periodo de actividad y puede presentarse en otros sectores alrededor" de la cumbre.

Esos olores pueden llegar a otros sectores, de acuerdo con la tasa de emisión de gases volcánicos y la dirección del viento, añadió la fuente de la entidad.

Una erupción del volcán del Ruiz causó la peor tragedia natural de la historia en Colombia el 13 de noviembre de 1985 y arrasó la localidad de Armero tras un deshielo y una posterior avalancha que causaron la muerte de unas 25.000 personas.

El Ruiz, con una altitud de 5.364 metros sobre el nivel del mar y que se eleva en la Cordillera Central andina colombiana, ha mantenido desde entonces una actividad baja e intermitente con niveles de alerta que no pasaban de la escala amarilla.
 
EFE