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Operación curul

Unas grabaciones efectuadas en las pasadas elecciones tienen en el ojo del huracán a la alcaldesa de Neiva, Cielo González, y a su hermano, el senador Carlos Julio González.

15 de abril de 2006

En Colombia para nadie es un secreto que cuando los políticos están en campaña ofrecen y hacen de todo para conseguir votos. Muchos de ellos tienen claro que la vía más rápida para obtener sufragios no está en persuadir electores con propuestas, ideas o proyectos. El camino que garantiza una curul se mide en lo que hacen pocas semanas antes e, incluso, durante el día de elecciones. Valiéndose de la necesidad de los electores, regalan ventiladores, bultos de cemento, tejas, mercados o dinero. También prometen empleos, casas y becas. En la mayoría de los casos, una curul en el Senado implica un operativo de centenares de personas y decenas de millones de pesos. Esas prácticas politiqueras, que no son nuevas, generalmente están en los límites de lo legal y ético y ocurren en casi todos los rincones del país.

"Necesito una buseta para traer unos abuelitos, hacer que voten y los devolvemos". "Tengo la dirección de un señor incapacitado que tenemos que recoger para hacerlo votar". "La gente está aquí en la casa del doctor reclamando alimentos y bebidas". "Traigan arroz para repartir de ese que están dando en las comunas". "Necesito a los dos chinos que porque ellos tienen las seis cédulas". Todas estas podrían parecer frases que ejemplifican esas prácticas politiqueras. Lo grave es que, aparentemente, no son simples ejemplos. Por el contrario, éstas, entre muchas otras, hacen parte de ocho horas de grabaciones que desde hace varias semanas han desatado un hervidero político en Neiva. La razón para la álgida polémica que se ha desencadenado es muy sencilla. Las grabaciones presuntamente implicarían a funcionarios y contratistas de la Alcaldía de la capital huilense en actividades de proselitismo político para favorecer a Carlos Julio González, quien salió electo senador en las pasadas elecciones, y es el hermano de la actual alcaldesa de Neiva, Cielo González.

La historia de las polémicas grabaciones comenzó a las 8 de la mañana del domingo 12 de marzo. Ese día, Carlos Eduardo Peinado, coordinador departamental de la red de emergencias de radioaficionados del Huila, utilizó sus equipos electrónicos y captó unas señales de radio que, según él, le parecían interesantes. Se trataba de una frecuencia en la que, presuntamente, conversaban por medio de radios portátiles los miembros de la campaña al Senado de Carlos Julio González.

Algunas de las voces que Peinado escuchó le parecieron familiares, ya que se trataba de altos funcionarios del gabinete municipal, entre los que se encontrarían, el director de la Oficina de Emergencias, Silvano Vargas; la secretaria de Salud, Janid Paola Montero; la tesorera municipal, Berta Borrero; la asesora de Empresas Públicas Gloria Constanza Vanegas, y la asistente de la Alcaldía, Sandra Marcela Muñoz. En las comunicaciones captadas por Peinado también aparecen varios contratistas del municipio (ver recuadro).

En las grabaciones, ellos, que de acuerdo con la ley estarían impedidos para participar en actividades políticas por tratarse de funcionarios, aparecerían en conversaciones con miembros de la campaña de González realizando coordinaciones para movilización de votantes, distribución de publicidad y entrega de almuerzos a los electores. SEMANA se comunicó con varios de los funcionarios supuestamente involucrados en las grabaciones, pero muy pocos aceptaron referirse al asunto. Otros, como Silvano Vargas, negaron haber participado en política e incluso afirmaron que "si hay grabaciones, esa no es mi voz".

La Alcaldesa de Neiva le dijo a SEMANA que no sólo no participó en actividades de la campaña de su hermano, sino que lo descartó. "Ningún funcionario de la administración recibió instrucciones o participó en actividades políticas el día de las elecciones. Son montajes y acusaciones infundadas de enemigos políticos", dijo la funcionaria a SEMANA. El senador González, por su parte, también sostuvo que su campaña no contó con ayudas de miembros del gabinete de su hermana y que las grabaciones que andan circulando por toda Neiva son "un montaje motivado por venganzas personales y políticas".

Hace dos semanas, tras conocer que varias copias de las grabaciones estaban en poder de algunos medios de comunicación, el senador González instauró una demanda contra Peinado, por extorsión.

Lo cierto del caso es que las voces de varios de los funcionarios y contratistas municipales que aparecen en las cintas coinciden y hay testigos que afirman haber visto el día de las elecciones a miembros del gabinete de la alcaldesa Cielo González participando activamente en la campaña de su hermano Carlos Julio. El caso, que ha sido el tema de conversación y controversia en las calles de Neiva desde hace varias semanas, está en manos de la Fiscalía y la Procuraduría, que son las que tendrán que definir si Peinado tiene la razón. De ser así el senador se expone a una investigación en la Corte, y su hermana y parte de su gabinete, a sanciones disciplinarias.