RELACIONES EXTERIORES

Canciller de Ecuador descarta reunión con colega colombiano

30 de enero de 2009

QUITO (AP) _ El canciller Fander Falconí dijo el viernes que no asistirá a un foro en la ciudad colombiana de Pasto, en la frontera, y afirmó que tampoco se reunirá con su colega Jaime Bermúdez para dialogar sobre las interrumpidas relaciones diplomáticas.

"No voy a ir a Pasto. Yo no puedo ir a Pasto mientras las relaciones diplomáticas están rotas", dijo el ministro a la prensa en referencia al foro, entre el 9 y 10 de febrero, destinado a tratar sobre el desarrollo a ambos lados de la frontera.

Y "no voy a tener ninguna reunión con el canciller colombiano", añadió Falconí en relación a versiones de prensa sobre una posible cita en Pasto.

Ecuador rompió sus relaciones con Colombia el 3 de marzo, dos días después de que fuerzas militares colombianas incursionaron en territorio ecuatoriano para atacar un campamento de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), lo que fue considerado por Quito como una violación a su soberanía.

Una misión de la Organización de los Estados Americanos (OEA) que verifica el estado de las relaciones se encuentra en Bogotá y su presencia en Ecuador todavía es incierta porque aún no se ha definido la fecha de su visita, según confirmó Falconí.

Sobre el anuncio de autoridades colombianas de incrementar la presencia militar en su frontera con Ecuador para reforzar el control, el canciller dijo que "esto no cambia nada" la relación entre los dos países.

"Esperamos los hechos no solo las palabras", declaró y recordó que ese "es uno de los tantos requisitos que ha planteado el país para reanudar las relaciones diplomáticas".

A pesar de que Ecuador ha solicitado mayor control de Colombia en su frontera, Falconí también expresó "una preocupación muy fuerte" por las consecuencias del incremento de fuerzas militares en cuanto al posible desplazamiento de colombianos hacia Ecuador producto de la "presión".

Los otros "requisitos mínimos" para restablecer las relaciones que Ecuador ha fijado son: dejar de vincular a autoridades ecuatorianas con las FARC, entregar información sobre la incursión del 1 de marzo, reparar los daños ocasionados con esa operación y contribuir a la asistencia de refugiados colombianos que llegan a Ecuador producto del conflicto.

Los dos países comparten alrededor de 640 kilómetros de frontera, en buena parte de ella, por el lado colombiano operan grupos armados irregulares, que suelen pasar a territorio ecuatoriano para huir del asedio de militares de su país o en busca de alimentos, medicinas y descanso.