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“Proceda, doctor Diego”

A la Corte Suprema de Justicia le corresponde establecer si con esta autorización al “doctor Diego” el senador Uribe incurrió en un delito.

Daniel Coronell, Daniel Coronell
5 de octubre de 2019

La Corte Suprema de Justicia tiene una prueba de que el expresidente Álvaro Uribe autorizó expresamente al abogado Diego Cadena para ofrecerle favores jurídicos a un testigo. Se trata de una llamada interceptada en la que Cadena le consulta a Uribe si está bien que le ofrezca al testigo Juan Guillermo Monsalve la elaboración de un recurso de revisión de su sentencia. De acuerdo con la grabación, el senador Uribe, quien está citado esta semana para rendir indagatoria ante la Corte Suprema, le da su visto bueno al ofrecimiento.

La Corte Suprema investiga al expresidente por la presunta comisión de los delitos de soborno en actuación penal y fraude procesal. En el auto que lo llama a indagatoria la corte afirma:

“En la actualidad, el senador Uribe Vélez continúa utilizando los servicios del abogado Diego Javier Cadena Ramírez, quien, con la colaboración de otras personas, ha contactado en diferentes cárceles –y por fuera de ellas– a exmiembros de grupos paramilitares para que –a cambio de favores jurídicos y, al parecer, dinero– elaboren escritos y videos a favor del senador Álvaro Uribe Vélez y de su hermano Santiago”.

Uno de esos favores jurídicos está narrado en el mismo documento de la Corte Suprema. El auto describe la reunión de febrero de 2018 entre Cadena y el testigo Juan Guillermo Monsalve en el patio de extraditables de la cárcel La Picota:

“En desarrollo de la conversación, el abogado Cadena le manifestó a Monsalve actuar en nombre del doctor Álvaro Uribe Vélez y le pidió firmar un documento previamente elaborado con el fin de presentarlo con el recurso de reposición interpuesto contra la decisión del 16 de febrero, cuyo término para sustanciar se vencía al día siguiente, esto es, el 23”.

Y continúa el auto de la Corte Suprema relatando lo que el abogado le ofreció al testigo que por años ha declarado contra su cliente:

“En contraprestación, Cadena Ramírez le ofreció a Monsalve Pineda presentar una acción de revisión en su caso sin cobrarle honorarios…”.

Estas y otras conductas en las que incurrió Cadena vienen siendo examinadas por la Fiscalía General de la Nación en tres procesos que avanzan a paso de tortuga. Mientras tanto, la sala de instrucción de la Corte Suprema tiene que determinar, entre otras cosas, si el senador Uribe sabía del ofrecimiento de su abogado al testigo.

Pues bien, una de las llamadas interceptadas entre Diego Cadena y el expresidente Uribe se desarrolla en estos términos:

–Pero presidente, yo tengo algo en mente pero quiero consultarlo con usted, y es un tema que me faculta para poder ayudar a este señor. Es una acción de revisión ante la corte porque el señor tiene una condena de 44 años por secuestro. Yo lo que puedo hacer es un re…

–Ah, sí, no… –interrumpe Uribe– un recurso jurídico hay que adelantarlo...

–Claro… –responde Cadena.

–El recurso jurídico está bien, por supuesto y la… y la ayuda para que le protejan la familia, pedírsela a las autoridades competentes y además públicamente –señala Uribe.

–Correcto, quería su autorización, presidente, para estar ciento por ciento claros –solicita Cadena.

–Proceda, doctor Diego, que usted hace las cosas bien hechas.

A la Corte Suprema de Justicia le corresponde establecer si con esta autorización el senador Uribe incurrió en un delito. Los magistrados que esta semana oirán en indagatoria a Uribe y decidirán su situación jurídica en los próximos días son distintos a los que lo citaron a la diligencia hace más de un año.

Su deber es decidir en derecho y solamente en derecho. También tendrán que demostrar que ninguna manifestación –aunque resulte muy concurrida– es suficiente para impedir la aplicación de justicia.

Nadie, por poderoso que sea, puede estar por encima de la ley.

Vea a Daniel Coronell hablar sobre su columna "La fiesta sorpresa" que revela interceptacione en las que Diego Cadena cuenta las intenciones que tiene contra él