En menos de un mes podrían quedar libres el cabo Moncayo y el soldado Calvo

La senadora Piedad Córdoba, quien en la noche del miércoles reveló una prueba de supervivencia de del cabo Pablo Emilio Moncayo, anunció que éste y  el soldado Josué Daniel Calvo serán liberados por las Farc en menos de un mes, y que los restos del mayor de la Policía, Julián Ernesto Guevara, serán entregados a sus familias.

“Me parece que es importante, es positivo (la entrega de las pruebas de supervivencia de Pablo Emilio Moncayo). El Presidente (Álvaro Uribe) pidió pruebas de supervivencia nuevamente y hay una ya que acaba de llegar y que hace relación a la decisión unilateral de las Farc de liberarlos, y creo que lo que se debe hacer en este momento es todo lo que se requiere en logística, yo creo que en un mes estaríamos por fuera de este proceso”, dijo la congresista en la Universidad de Medellín.

Dichas liberaciones tienen más posibilidades de hacerse realidad luego de que el presidente Uribe, durante un Consejo Comunal el pasado fin de semana, accediera a que las Farc liberaran a los secuestrados no de manera simultánea, sino de a uno o dos, como lo había propuesto el grupo guerrillero.

Para dicha liberación, la senadora Córdoba pidió la colaboración del Alto Comisionado para la Paz, Frank Pearl, de la Iglesia Católica y del Comité Internacional de la Cruz Roja, estos dos últimos organismos autorizados por el gobierno para participar en los operativos.

Revive la esperanza

Sin duda, quien más ilusionado está tras conocer la prueba de supervivencia y el anuncio de la congresista liberal es el profesor Gustavo Moncayo, conocido como el caminante por la paz, aunque no pudo ocultar su asombro al verlo tan cambiado.

“Yo pensé que era una broma, veía a un señor, a un viejo y pensaba que era él quien iba a presentar a Pablo Emilio, pero cuando hizo la presentación y dijo que era el cabo segundo pensé, esto es increíble (...) yo no sé de dónde saca uno tanta fuerza para soporta esto, sentí que se me venía el mundo encima ver como ha cambiado totalmente”, dijo el profesor Moncayo en RCN radio.

Aprovechó para hacer un llamado al gobierno para que facilite el proceso de liberación de su hijo y de todos los que están privados de la libertad, porque “con tanto tropiezos no se sabe quién tiene el corazón más duro, si la guerrilla o el gobierno”. Escúchelo.

También invitó a toda Colombia a unirse en una oración el día viernes en la marcha que irá desde Guacarí hasta el Señor de los Milagros, Buga, para pedir por la paz del país, “por la libertad de los secuestrados, especialmente por la de mi hijo Pablo Emilio”.

María Stella Cabrera, madre del cabo Pablo Emilio Moncayo, dijo en Caracol Radio que vio a su hijo muy cambiado y que sólo entonces cayó en la cuenta de que ya no es el adolescente que se llevaron las Farc en la toma al cerro de Patascoy en Nariño, hace casi 12 años. "Él ya tiene 31 años, toda su vida la ha pasado allá", dijo.

"Lo vi muy cambiado, pero espiritualmente está muy equilibrado, centrado, seguro de lo que dice. Lo veo muy lúcido como siempre y eso me tranquiliza un poco", dijo María Estella desde Sandoná, Nariño, y añadió que también le preocupa cuando su hijo habla de bombardeos y persecuciones, pero cree que lo abrazará pronto.

Aprovechó para enviar un mensaje de esperanza a todos los secuestrados. "No se dejen morir. Ustedes tienen mucho que dar, son muy valiosos para sus familias", finalizó.

En la misma emisora habló el Comisionado de Paz, Frank Pearl, quien también recibió con satisfacción la prueba de vida del cabo Moncayo y aseguró que el gobierno continúa dispuesto a facilitar las liberaciones de los demás secuestrados.

Piedad Córdoba dijo que enviarán un documento a las Farc para definir cómo se dará la liberación de Moncayo. “Hemos estado trabajando en un documento que enviaremos en los próximos días a las Farc buscando mecanismos para que se dé esta liberación y se avance rápidamente hacía el intercambio humanitario”.

La senadora dijo que las pruebas le llegaron de sorpresa y que no sabe si llegarán nuevas, además que no opinará nada más porque le parece riesgoso.