Los cinco compromisos de Santos con Chocó

No es la primera vez que Chocó, el departamento más pobre del país, es visitado por un presidente de la República. No es la primera vez que los dirigentes y la propia comunidad reclaman mayor atención del gobierno central.

El presidente Juan Manuel Santos, que tenía prevista una visita a Quibdó, trabajó con su gobierno para que fuera diferente a las de épocas pretéritas. Por eso decidió hacer el consejo de ministros del mes de marzo en la capital del departamento. "Por aquí han pasado todos los presidentes y han dicho lo mismo. Chocó sigue sumido en la pobreza en medio de una gran riqueza", dijo el mandatario.

Por eso, Santos, al sesionar con su gabinete, quiso mandar otro mensaje, pese al escepticismo que siempre hay en los habitantes del departamento.

Tras cinco horas de trabajo, los chocoanos oyeron del mandatario nuevas promesas. O tal vez la reafirmación de "promesas históricas" pero que aún siguen sin desarrollarse. El mandatario le pidió al gobernador, Luis Gilberto Murillo, y a la alcaldesa de Quibdó, Zulia Mena, que articularan los planes de desarrollo del departamento con el Plan Nacional de Desarrollo, para hacer "más efectiva" la solución de necesidades.

La respuesta al paro armado

Santos reiteró metas con Chocó. En seguridad, confirmó el aumento del pie de fuerza de la Policía con 300 unidades más. Autorizó la creación de un batallón permanente, que se ubicará en Riosucio, además de la creación de la ‘Unidad Meteoro’, que tendrá la función de vigilar la carretera que comunica el departamento con Risaralda. Una de las vías más críticas del país.

Las decisiones, dijo Santos, fueron respuesta al paro armado de la semana anterior, una situación que, dijo, “está plenamente controlada”.

El Ministerio del Interior también se comprometió con el departamento a financiar la construcción de nuevos puestos de policía y la dotación de cámaras para el trabajo de la Policía en el departamento.

Las obras soñadas

No fueron los únicos compromisos. El ministro de Transporte, Germán Cardona, anunció que en menos de dos meses empezará la construcción de las carreteras Quibdó-Pereira y Quibdó-Medellín, históricos reclamos del departamento. El proceso de licitación está a punto de terminar. Será una inversión cercana a 560.000 millones.

Santos anunció que el ministro de Minas, Mauricio Cárdenas, asumió el compromiso de aumentar la conexión energética y beneficiar a 30.000 perosnas que nunca han tenido el servicio.

En educación, aumento del 149 porciento de los recursos que históricamente se habían comprometido en la materia. Serán 17.000 millones adicionales. La inversión para acueducto y alcantarillado será de 370.000 millones. El ministerio de las TIC, por su parte, se comprometió a conectar 19 municipios con redes de fibra óptica.

Santos, además, se comprometió a poner "sus buenos oficios" para que en el 2018 Chocó sea sede de los Juegos Nacionales. Una petición expresa de la alcaldesa de Quibdó, a la que le aseguró, de entrada, 5.000 millones para la instalación de una grama sintética en el municipio.

Y hasta Colombia Humanitaria recordó que se están invirtiendo 155.000 millones en 327 obras que están en ejecución. Este lunes, el presidente Santos entregó las dos primeras: un muro de contención y una volqueta. Pero pidió al gobernador y a la alcaldesa mayor agilidad en la ejecución de las obras.

"La plata llega y se pierde"
 
El gobernador Murillo y la alcaldesa Mena se comprometieron con Santos en que serán "un ejemplo de transparencia". Históricamente Chocó ha sido el departamento donde mayores decisiones en contra de alcaldes y gobernadores han sido sancionados por la Procuraduría, por hechos de corrupción. "Históricamente la plata llega a Chocó y se pierde. Para mí es música celestial que quieran ser ejemplo de transparencia", dijo el presidente.

Así como hace tres semanas, Juan Manuel Santos se fue con todos sus ministros a sesionar desde San Vicente del Caguán (Meta), ahora lo hizo en Quibdó. En un día de promesas, o metas, como prefiere llamar el Gobierno, similares a las que se han repetido durante la historia, pero a las que Santos se mostró dispuesto a que lo evalúen con exigencia.