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El sargento Michael Cohen y el contratista César Ruiz, señalados de violar a una niña en Colombia.

MILITARES EE.UU.

Revive caso de niña que habría sido violada por militares de EEUU en Melgar

El senador del Polo Democrático, Gustavo Petro, no logró que sus colegas escucharan el testimonio de Olga Lucía Castillo, mamá de una niña que fue presuntamente violada por militares gringos en el 2006. El caso sigue impune.

12 de agosto de 2009

Hace tres años, el país conoció la dramática historia de una niña de 12 años que había sido violada presuntamente por dos militares estadounidenses cerca de una base de la Fuerza Aérea Colombiana en Melgar, Tolima.

Los implicados eran el sargento Michael J. Cohen y un contratista retirado del Ejército, César Ruiz, quienes estaban en labores que tenían que ver con el Plan Colombia.

Al parecer, en la noche del 27 de agosto de 2006, la niña se encontraba en el baño de un restaurante de la población y luego de salir fue obligada por los militares a tomarse una bebida. Después se la llevaron al dormitorio que tenían asignado en la base, donde se cree que la violaron, la filmaron y a la mañana siguiente la abandonaron en un parque.
 
Luego de que el gobierno nacional confirmara que la presencia militar de Estados Unidos se reforzaría en siete bases colombianas, y después de que el general Freddy Padilla, comandante de las Fuerzas Militares, garantizara además que los militares que cometan delitos o irregularidades serán juzgados como corresponde, el senador Gustavo Petro se dio a la tarea de buscar a Olga Lucía Castillo, madre de la niña, quien hasta el momento no ha logrado justicia en el caso de esta violación.

Sin embargo, ayer martes, cuando en el Senado se debatía justamente el tema de las bases militares y Petro quiso que sus colegas escucharan el testimonio de la señora Castillo, algunos senadores ripostaron.

“No tienen otra intención de aprovecharse del dolor. Por qué no más bien hablar de las violaciones que ha hecho la guerrilla en el campo”, dijo el senador Jorge Hernando Pedraza. A esa voz se unieron otros senadores como Gloria Inés Ramírez y Elsa Gladys Cifuentes que pidieron no volver el debate algo pornográfico y violatorio de la intimidad.
“Si la intención es que no hable, pues que lo digan. ¿Cuál es el temor para que una madre de una hija violada por un ‘marine’ no pueda hablar en Colombia?”, dijo Gustavo Petro, quien con el testimonio de Olga Castillo quería demostrar los riesgos que existen al permitir la permanencia de más militares de Estados Unidos en Colombia.

Al término del debate, que fue levantado por falta de quórum, el senador del Polo Democrático aseguró que insistirá en llevar nuevamente la denuncia en la sesión del próximo martes en el Congreso.