Acromegalia
Acromegalia: estos son los síntomas y causas | Foto: Getty Images/iStockphoto

SALUD

Acromegalia: estos son los síntomas y las causas

Si no se trata a tiempo, esta enfermedad puede provocar problemas de salud graves, tanto que podrían llegar a ser mortales.

27 de octubre de 2021

Mayo Clinic define la acromegalia como un “trastorno hormonal que se padece cuando la glándula pituitaria produce gran cantidad de hormona de crecimiento durante la edad adulta”.

Explica que cuando las personas tienen un nivel muy elevado de la hormona del crecimiento se produce, a la par, un aumento en el tamaño de los huesos. Cuando esto ocurre en la niñez, provoca un aumento de la estatura denominado gigantismo, mientras que en la edad adulta no hay cambios en la estatura de la persona, pero sí en otras partes del cuerpo: la cara, las manos y los pies; es conocido como acromegalia.

La entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación explica que este trastorno, en muchas ocasiones, no es de fácil detección; de hecho, pueden pasar años hasta que llegue a ser diagnosticado. Lo anterior se debe a que la acromegalia es poco común y a que los cambios físicos ocurren lentamente con el paso del tiempo.

Si no se trata, los altos niveles de la hormona de crecimiento pueden afectar otras partes del cuerpo, además de los huesos. Esto puede llevar a problemas de salud graves, a veces incluso mortales. Sin embargo, los tratamientos pueden reducir el riesgo de complicaciones y mejorar los síntomas de forma significativa, incluso el aumento de volumen de tus facciones”, precisa.

Explica que uno de los signos más comunes de este trastorno hormonal es el aumento del tamaño de las manos y los pies, puede ser detectado si un anillo deja de entrar en los dedos o si el número de calzado empieza a aumentar de forma progresiva.

En el caso del rostro, la mayoría de las facciones puede verse afectada de forma gradual: mandíbula y frente protuberantes, nariz agrandada, labios más gruesos y más espacio entre los dientes.

“Debido a que el progreso de la acromegalia es lento, los primeros signos pueden no ser evidentes durante años. En ocasiones, las personas notan los cambios físicos solo al comparar fotografías viejas y nuevas”, indica la entidad estadounidense.

En palabras de Mayo Clinic, la acromegalia puede producir diversos signos y síntomas, los cuales pueden variar de una persona a otra:

  • Manos y pies más grandes.
  • Rasgos faciales más grandes, en los huesos del rostro, los labios, la nariz y la lengua.
  • Piel áspera, grasosa y más gruesa.
  • Sudoración excesiva y con olor.
  • Pequeñas verrugas en la piel (fibromas blandos).
  • Fatiga y debilidad articular o muscular.
  • Dolor en las articulaciones y movilidad reducida.
  • Voz más grave y áspera debido al aumento de tamaño de las cuerdas vocales y los senos nasales.
  • Ronquidos fuertes debido a la obstrucción de las vías respiratorias superiores.
  • Problemas de visión.
  • Dolores de cabeza, que pueden ser persistentes o fuertes.
  • Irregularidades en el ciclo menstrual de las mujeres.
  • Disfunción eréctil en los hombres.
  • Pérdida del deseo sexual.

El doctor Camilo Silva Froján, especialista del Departamento de Endocrinología y Nutrición de la Clínica Universidad de Navarra (CUN), explica que en los adultos, un tumor es la causa más común de exceso de la hormona del crecimiento y se divide en tumores pituitarios y no pituitarios.

En lo que refiere a los primeros, los tumores pituitarios, indica que “la mayoría de los casos de acromegalia son causados por un tumor no canceroso (benigno) o adenoma, de la glándula pituitaria”. Se trata de tumores que pueden ejercer presión sobre los tejidos cercanos a medida que crecen, una presión que puede provocar algunos de los síntomas de este trastorno hormonal, como el caso de los dolores de cabeza y los problemas de visión.

Sobre los tumores no pituitarios, el doctor Froján precisa que en algunas personas “la acromegalia es causada por tumores benignos o cancerosos en otras partes del cuerpo, como los pulmones, el páncreas o las glándulas suprarrenales”.