Guayaba
Así la guayaba podrá ayudarlo a combatir el estreñimiento | Foto: Getty Images

SALUD

Cómo utilizar la guayaba para combatir el estreñimiento

Lo ideal es consumirla con cáscara, esta fruta no reemplaza ninguna medicina o tratamiento farmacológico.

7 de septiembre de 2021

El estreñimiento, es una afección en la que las personas pueden tener menos de tres evacuaciones a la semana, heces duras, secas o grumosas, dificultad o dolor para evacuar las heces y sensación de que la evacuación no fue completa, reseña el Instituto Nacional de la Diabetes y las Enfermedades Digestivas y Renales (NIDDK, por sus siglas en inglés). Y es catalogado como uno de los trastornos digestivos más comunes que se presentan en la cotidianidad.

No es considerado una enfermedad, pero sí puede ser un síntoma de otro problema médico, el cual puede durar un tiempo corto o largo. El NIDDK explica que las personas pueden tener diferentes patrones de movimiento intestinal y cada quien sabe lo que es normal para su organismo.

Las mujeres –especialmente durante el embarazo o después del parto–, los adultos mayores, las personas de razas diferentes de la blanca, las personas que consumen poca o nada de fibra, las personas que toman ciertos medicamentos o suplementos dietéticos y las personas que sufren ciertos problemas de salud –incluidos los trastornos funcionales del tracto gastrointestinal–, son más propensas a sufrir de estreñimiento.

El NIDDK destaca que las personas que sufren estreñimiento de corta duración “por lo general no tienen complicaciones. Sin embargo, el estreñimiento de larga duración puede tener complicaciones, que incluyen: hemorroides, fisuras anales, prolapso rectal e impactación fecal”.

Entre los problemas de salud y nutrición que pueden causar estreñimiento están: No comer suficiente fibra; no beber suficientes líquidos (o deshidratarse); no hacer suficiente actividad física; enfermedad celíaca; trastornos que afectan el cerebro y la columna vertebral, como la enfermedad de Parkinson; lesiones del cerebro o la médula espinal; afecciones que afectan el metabolismo, como la diabetes; afecciones que afectan las hormonas, como el hipotiroidismo; inflamación vinculada a la enfermedad diverticular o a la proctitis; obstrucción intestinal, incluidos el bloqueo anorrectal y los tumores, y problemas anatómicos del tracto digestivo.

La alimentación juega un papel clave en el estreñimiento, por lo que algunos cambios en la dieta pueden contribuir en el tratamiento de esta afección, ayudando a que haya un ablandamiento de las heces y se facilite la evacuación. Entre el listado de alimentos que pueden ayudar con este propósito está la guayaba.

Esta fruta se puede consumir a diario, es rica de vitamina C y tiene le doble de esta vitamina que la naranja: contribuye a la creación de glóbulos rojos, de colágeno y favorece a la absorción de hierro, además de ayudar al buen funcionamiento del sistema inmunológico para proteger al cuerpo contra las enfermedades.

Guayaba
El consumo de guayaba puede ser un remedio eficaz para regularizar la función intestinal. | Foto: Imagen tomada de Freepik

La guayaba es conocida por sus propiedades antimicrobianas y antibacterianas, según afirma un estudio realizado por la Fort Valley State University (Estados Unidos), citado por el portal MejorConSalud, por lo que se considera que tendría la capacidad de eliminar bacterias, hongos y otras infecciones.

En lo que refiere al estreñimiento, el consumo de esta fruta, especialmente la ingesta de sus semillas, puede ser un remedio eficaz para regularizar la función intestinal. Es de destacar que lo ideal es consumirla con cáscara, pues este alimento no reemplaza ninguna medicina o tratamiento farmacológico.

La directora de Alimentación y Nutrición en la sede de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) en Roma, dijo que “las frutas y verduras son parte integral de una dieta saludable. No se puede hablar de una dieta saludable y dejar de lado las frutas y verduras”.

No obstante, el consumo de frutas y verduras en la mayoría de los países del mundo aún no alcanza el mínimo diario de 400 gramos per cápita recomendado por la FAO y la Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS).