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La alimentación es clave para regular la presión arterial. | Foto: dpa/picture alliance via Getty I

Salud

El superalimento que ayuda a regular la presión arterial y a bajar de peso

Este producto es rico en fibras y tiene un bajo contenido de sodio.

Redacción Vida Moderna
3 de enero de 2024

La presión arterial se define como la fuerza que ejerce la sangre contra las paredes de los vasos sanguíneos, cada vez que el corazón la bombea. La tensión se incrementa con los latidos del órgano y en este caso se le conoce como sistólica. En el momento en que está en reposo, entre latidos, esa presión baja y es llamada diastólica.

Cuando la fuerza de la sangre se eleva por mucho tiempo, es posible que se desarrolle hipertensión. Esta es una enfermedad que se caracteriza por no generar síntomas y por ello es posible que una persona la tenga sin que lo sepa. La Biblioteca Nacional de Medicina de Estados indica que la única manera de averiguar si se tiene presión arterial alta es a través de chequeos regulares que permitan determinarlo.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), en muchas ocasiones esta afección produce daños cardíacos graves, debido a que el exceso de presión endurece las arterias, lo que reduce el flujo de la sangre y el oxígeno que llegan al corazón.

Presión arterial
La presión arterial elevada puede causar inconvenientes del corazón. | Foto: Getty Images

La alimentación es determinante para evitar que la presión arterial se eleve. Regular el consumo de grasas e incrementar el de frutas y verduras, así como de cereales integrales, proteínas magras y mucha hidratación es determinante. Esto, acompañado de la práctica regular de ejercicio físico.

La importancia de las semillas de chía

En el marco de una dieta equilibrada, pueden incluirse alimentos como las semillas de chía. Este producto ha ganado reconocimiento por ser una fuente vegetal de ácidos grasos poliinsaturados, en especial de ácido alfalinolénico (ALA), precursor vegetal del omega-3.

El estudio titulado Seeds of Salvia hispanica L., “chia” as a source of macronutrients, dietary fiber and minerals concluye que este producto es un alimento de alto valor nutricional debido al buen contenido de lípidos, proteínas y fibra alimentaria.

Las semillas de chía están compuestas de omega-3.
Las semillas de chía son ricas en omega-3. | Foto: Getty Images

Además, de acuerdo con la investigación, son buena fuente de potasio, calcio y magnesio, y tienen un bajo contenido de sodio, lo hace recomendable para dietas tendientes a controlar los niveles de presión arterial.

Por su parte, el análisis Chia seed (Salvia hispanica L.) supplementation to the diet of adults with type 2 diabetes improved systolic blood pressure: A randomized controlled trial, concluyó que la suplementación con semillas de chía ayudó a reducir los niveles de presión arterial sistólica en pacientes con diabetes, lo que indica, según los científicos, que ayudan a prevenir el desarrollo de hipertensión.

Se dice que su elevado contenido en omega-3, ácido graso esencial con propiedades antiinflamatorias, antitrombóticas y vasodilatadoras, tiene mucho que ver en el tratamiento de la presión arterial y la regulación del colesterol en la sangre. De igual forma, su ingesta contribuye a disminuir las lipoproteínas LDL, es decir, el colesterol malo y aumenta las HDL, el colesterol bueno.

En esto aportan también su riqueza en fibra y la presencia de beta-sitosteroles, compuestos de las plantas que resultan beneficiosos en enfermedades coronarias y frente al colesterol alto, precisa el portal Cuerpo Mente.

Semillas de chía
Las semillas de chía son muy saludables para el corazón. | Foto: Getty Images/Image Source

Ayudan a perder peso

Otro de los beneficios de las semillas de chía es que ayudan con la pérdida de peso, debido a que su ingesta produce sensación de saciedad gracias a su gran capacidad de absorber líquidos.

Adicionalmente, como regula los niveles de azúcar en la sangre, contribuye a evitar que se presente ansiedad por el consumo de alimentos, evitando que las personas estén comiendo de manera permanente.

Referencias científicas: