Infusión natural para reducir la ansiedad, los nervios y el estrés; así se prepara

La ansiedad es un sentimiento de miedo, temor e inquietud. Cuando esta situación se presenta, es posible que la persona sude, se siente inquieta, tensa y enfrente palpitaciones. En ocasiones puede ser una reacción normal al estrés, precisa la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.

Hay veces en que la ansiedad se confunde con los nervios; pero son dos cosas diferentes. La primera puede llegar a ser limitante y en oportunidades desproporcionadas frente al estímulo que la genera; mientras que los nervios permiten adaptarse a una situación.

Cuando una persona siente nervios, su origen es externo; mientras que en el caso de la ansiedad, los factores son internos como, por ejemplo, preocupación, anticipación de eventos improbables, pensamientos negativos, fatiga y hasta dificultad para concentrarse, entre otros.

Si bien son situaciones diferentes, lo cierto es que ocasionan momentos complejos y apoyarse en remedios caseros puede ser una salida a esa coyuntura. Una de esas posibles ayudas naturales es la lavanda, una planta floral que pertenece a la familia de la menta.

Lavanda, un calmante

El portal Cuerpo Mente asegura que es una hierba sedante, que reduce la tensión nerviosa, las palpitaciones, los estados de ansiedad, el insomnio y ayuda a controlar la tensión arterial.

Para obtener sus beneficios, se puede preparar una infusión con las flores. Para ello se requiere de una cucharada de flores de lavanda y taza de agua hirviendo. Se añaden las flores en el agua y se deja reposar de cinco a 10 minutos. Luego, se cuela y se bebe. Este té puede consumirse hasta tres veces al día.

De igual forma, es posible usar el aceite en aromaterapia, mezclarlo con un aceite base para masajes o agregarlo a la bañera. Según el portal Medical News Today, el aceite esencial de lavanda contiene unos químicos llamados terpenos.

Esta fuente cita un artículo de revisión de 2017, el cual sugiere que dos de estos terpenos llamados acetato de linalol y linalil pueden tener un efecto tranquilizante en los receptores químicos del cerebro. Otra de las conclusiones fue que este producto sería un tratamiento efectivo a corto plazo para los trastornos de ansiedad. Sin embargo, hacen falta estudios relacionados con sus aportes para el largo plazo.

Otras opciones herbales

Otra planta que ayudaría en el propósito de calmar la ansiedad y los nervios es la albahaca. Si bien se le reconoce por sus usos en la gastronomía, también en la cultura popular la recomiendan para equilibrar el sistema nervioso.

Sus hojas y aceites esenciales actúan como relajantes en el organismo y combaten el estrés, la ansiedad y los nervios, según información de la revista Mejor con Salud. Se pueden consumir, de acuerdo con la citada fuente dos o tres tazas de infusión de albahaca al día.

En este sentido, el portal Gastrolab de México, asegura que esta planta es buena para hacerle frente al estrés, ya que “consumirla en cantidades pequeñas puede ayudar a detener la producción excesiva de cortisol, la hormona del estrés, pero también ayuda a incrementar la segregación de endorfinas, lo que es ideal para que la persona se relaje y se sienta más tranquila”.

Otras plantas que serían beneficiosas para controlar los nervios y mejorar los estados de ansiedad son: la pasiflora, de la cual se dice que estimula la relajación de los músculos y el sistema nervioso; el ginseng, que ha sido utilizado en la medicina tradicional china para calmar los nervios y controlar los trastornos emocionales y la valeriana a la que se le atribuyen efectos tranquilizantes que mejoran el estado de ánimo y ayudan a conciliar el sueño.