POLEMICA

Noni: ¿elíxir o moda?

Aunque le atribuyen la capacidad de curar muchos males los médicos sostienen que el noni es una moda más.

13 de octubre de 2002

En enero de este año, luego de tener a su tercer hijo, Judith Rojas, de 30 años, comenzó a sentir los síntomas de una nueva crisis de artritis: calor, hormigueo y dolor en las rodillas. En cuestión de segundos imaginó el proceso que siempre ha vivido cuando la enfermedad se acerca y que por lo general la deja sin posibilidad de caminar. Siempre había calmado estas molestias con drogas para la inflamación pero esta vez el dolor era tan fuerte que, sin pensarlo dos veces, aceptó la recomendación de sus amigas de tomar el jugo de noni, una fruta originaria de la Polinesia francesa que por estos días está en boca de todo el mundo. Para su sorpresa la crisis nunca llegó y ella hoy cree que fue gracias al jugo de esta fruta. "El noni atajó la crisis y lo mejor fue que no tuve que tomar medicamentos. Hoy sólo tomo el jugo", dice.

Al igual que ella, Graciela Martínez toma el jugo de noni religiosamente desde hace más de un año cuando le diagnosticaron dos pequeños tumores en la cabeza. Los detectaron en forma temprana y había buenas posibilidades de tratamiento: cirugía, quimioterapia y radioterapia. De las tres opciones anteriores ella aceptó la última. Las sesiones tuvieron un gran impacto en su aspecto físico y en su estado de ánimo. "Me sentía cansada, agotada", dice ella. Pero en una reunión donde una amiga recibió el consejo de tomar el jugo de noni. Inmediatamente lo encargó a Estados Unidos y en poco tiempo comenzó a ver resultados. "Me sentía rejuvenecida, con más energía y en mejor aptitud mental", dice Graciela. El tumor se redujo y hoy en las pruebas diagnósticas no hay rastro de el.

Judith y Graciela son dos de las muchas personas en Colombia que con regularidad toman noni. Lo hacen para curar todo tipo de enfermedades, desde desórdenes menstruales, diabetes y osteoporosis hasta cáncer, sida, hipertensión arterial, esclerosis múltiple y asma.

La morinda cirtrifolia o noni es una fruta utilizada ampliamente en Asia desde tiempos milenarios. Se le atribuyen muchas propiedades curativas gracias a sus varios componentes activos, tales como xeronina, proxeronina, damnacantal, escopoletina, aminoácidos, minerales y bioflavonoides, entre muchos otros. Pero al parecer la sustancia clave es la proxeronina, que tiene la capacidad de recuperar las proteínas de las células. De hecho, la Organización Mundial de la Salud la incluye en su catálogo de frutas y vegetales saludables En 1985 el médico Ralph Heinicke supo sacarle provecho a la planta y a sus poderes medicinales pero primero tuvo que resolver un grave problema: la fruta tiene olor y sabor desagradables. Para superar este obstáculo y poderla comercializar Heinicke ideó un proceso que le permitió darle sabor de uva y arándano sin alterar las propiedades del noni.

Como resultado de lo anterior, Heinicke creó Morinda, una de las compañías que inició este boom y que hoy cubre más del 95 por ciento del mercado mundial. Pero hoy, gracias a la demanda, la oferta se ha ampliado y según el Invima existen más de 67 registros sanitarios para productos relacionados con el noni. Se trata de un muy buen negocio, pues un frasco de noni cuesta entre 100.000 y 150.000 pesos. Como las dosis diarias que recomiendan son altas (tres onzas al día) un frasco de noni se acaba en poco tiempo.

Los defensores de la fruta aseguran que el secreto de la proxeronina es su capacidad para arreglar desórdenes en las células, lo que explica que funcione para resolver muchos males relacionados con daños de los distintos tejidos del cuerpo humano. "El noni refuerza el sistema inmunológico porque promueve la formación de leucocitos (glóbulos blancos) y esto explica por qué mejora la respuesta del organismo ante la enfermedad, señala Juan Alberto Maldonado, médico homeópata. Eso sí, hay que verlo como un muy buen apoyo para los tratamientos pero por sí sólo no cura las enfermedades", agrega.

Sin embargo no todos los médicos están de acuerdo con este boom. Su principal objeción es que consideran exagerados los beneficios del noni y que no existen estudios serios que respalden sus bondades. Según ellos muchas otras frutas tropicales más baratas también ofrecen beneficios similares, entre ellos el aguacate (artritis), guayaba (controla la diabetes) y la berenjena (colesterol). "Es una moda más como la chuchuguaza, la uña de gato y el cartílago de tiburón", señala Francisco Cañón, médico frutólogo.

Por su parte, el oncólogo Ricardo Duarte, con 15 años de experiencia en tratamiento de diversos tipos de cáncer, jamás ha tenido noticia de las propiedades curativas del noni. A él le preocupa que mucha gente, alarmada cuando se entera de que tiene la enfermedad, se encomienda a este tipo de sustancias milagrosas y dejan avanzar la enfermedad de tal manera que, cuando llegan donde un especialista, ya es demasiado tarde. "Yo no puedo negarles que tomen medicinas alternativas, pero lo importante es que no las consideren como un tratamiento único sino como un complemento".

El noni no provoca efectos secundarios y por lo tanto su consumo no pone en peligro la salud. Pero es recomendable hacerle saber al médico que lo está tomando y verlo como una ayuda y no como un tratamiento integral, pues quienes así lo ven, mientras no se demuestre lo contrario, pueden poner en serio peligro su salud si abandonan los tratamientos convencionales.