De los campesinos colombianos, el 30,8 por ciento usa las tecnologías de la información y de la comunicación para sus actividades productivas | Foto: Saénz Fety

Estos son los 'gadgets' para el campo colombiano

Los productores nacionales apuestan por la tecnificación de la ruralidad y esperan lograr que su sector crezca por encima del PIB nacional. La innovación ya llegó a la ganadería, a las semillas y al catastro

1 de octubre de 2019

Siete de cada diez colombianos del campo no usan la tecnología, sobre todo por desconocimiento, de acuerdo con la encuesta de Usabilidad TIC en el Sector Agropecuario (Utsa). El rezago también tiene que ver con la ausencia de energía eléctrica, por lo que tampoco emplean internet.

Los campesinos requieren mejorar la productividad y sus condiciones de vida, y para ello deben superar el atraso tecnológico. Décadas de conflicto y abandono evidencian la necesidad de avanzar en investigación y capacitación para usar la tecnología. 

Cerrar las brechas exige “aumentar la investigación científica, la capacitación del capital humano y el emprendimiento en el campo colombiano”, de acuerdo con la viceministra de Asuntos Agropecuarios, Marcela Urueña Gómez. 

Por eso, ese despacho trabaja en la puesta en marcha del Sistema Nacional de Innovación Agropecuaria (SNIA). Se trata de un plan de transformación digital pública del agro para los próximos cuatro años. El Gobierno espera con él lograr que el sector crezca a una tasa de 4 por ciento anual de manera sostenible.

Por otro lado, recientemente, el presidente Iván Duque anunció el nuevo sistema de catastro multipropósito. Este, con imágenes satelitales de alta definición, podría actualizar para 2025 toda la información de los predios en el país. Según el mandatario, la nueva estrategia mejorará la titulación, fortalecerá las finanzas públicas de los territorios y generará beneficios para el ambiente. No obstante, si bien la tecnología puede apoyar el catastro, haría falta simplificar los procesos existentes. 

Empresas y universidades colombianas, a su vez, invierten en investigación y desarrollo. Y también en capacitar a los agricultores para aumentar la productividad de los cultivos, reducir los costos y mejorar las condiciones de vida de los campesinos. Con estas y otras iniciativas tecnológicas, el Gobierno y el sector privado buscan transformar el campo colombiano.

 

Hay 2,7 millones de productores en el campo; cuatro de cada diez viven en áreas dispersas | © DeLval

 

 

Tecnología en los establos

En el mundo, alrededor de 53.000 robots ordeñan vacas. En Colombia, el primer sistema de este tipo empezará a funcionar en octubre, proveniente de Holanda. Con esta tecnología, capaz de ordeñar hasta 85 diarias, una finca en Gachancipá liderará la tecnificación de esta labor tradicional. El robot facilita el trabajo y brinda beneficios, como el cuidado de los pastos y los animales. Pero, además, almacena información clave para los productores. Datos como la cantidad de leche producida, el estado nutricional, la temperatura corporal y hasta información relevante para prevenir enfermedades como la mastitis estarán disponibles a un clic. 

Poner en marcha los robots depende de la disponibilidad de internet y luz eléctrica. Según la encuesta Utsa, 1,5 por ciento de las personas en el campo no usa internet por falta de energía y 22,6, por los altos precios de este servicio. 

Darío Arango, gerente de Bienes de Capital de DeLaval, la compañía que trajo al país esta tecnología, estima que, en los próximos 20 años, el 80 por ciento de estos equipos en Colombia serían inteligentes.

 

Con el sistema de invernadero automatizado producen 50 kilos de tomate por metro cuadrado, cuando lo normal en el país es de 5 a 8 kilos por metro cuadrado | © Saénz Fety

 

 

Semillas 2.0

En gran medida, el éxito de la agricultura depende de la calidad de las semillas. Por eso, los invernaderos automatizados les permiten a los agricultores monitorear el potencial genético de los granos para adecuar las condiciones que optimicen su rendimiento. Así, desde un celular o computador, los campesinos pueden ver en tiempo real cómo se comporta su invernadero. 

Esta tecnología llegó a Colombia en 2014 y permite controlar, mediante sensores, factores como la frecuencia del riego, la temperatura y la presencia de insectos. De esta manera, los cultivadores pueden disminuir las pérdidas en sus cosechas y aumentar la producción.

Actualmente, solo 0,7 por ciento de los cultivadores colombianos emplean tecnologías para sistemas y equipos automatizados. En esta materia, “Colombia está por debajo del promedio de otros países”, según Alejandro Sáenz, director corporativo de Sáenz Fety. Esta empresa se dedica a la evaluación tecnológica para mejorar las prácticas en el campo. 

Con el sistema de invernadero automatizado, ubicado en Funza, “Logramos producir 50 kilos de tomate por metro cuadrado, cuando lo normal en el país es de 5 a 8 kilos por metro cuadrado”, explicó Sáenz.

 

 

 No todos los colombianos utilizan las nuevas herramientas tecnológicas, pues 36 por ciento no tiene acceso a internet | © Santiago Ramírez 

 

 

Cultivos en pantalla

Colombia tiene 40 millones de hectáreas aptas para cultivos, de acuerdo con la Unidad de Planificación Rural Agropecuaria (Upra). Además de conocer dónde sembrar, los campesinos necesitan saber las condiciones de su tierra y qué cultivos pueden tener éxito en ella. En eso consiste la agricultura de precisión, que usa los datos para identificar el potencial de cada área y orientar a los cultivadores en todas las etapas de su labor. 

En el escaso acceso a tecnologías en la ruralidad, las imágenes satelitales se destacan como las herramientas más usadas. En efecto, la encuesta Utsa encontró que 11,3 por ciento de los consultados dijo emplear las fotografías satelitales, que les ofrecen información precisa y detallada para identificar los terrenos aptos para sembrar. 

El Ministerio de Agricultura dio un paso importante para que esta tecnología tenga éxito en el país. Lo hizo al crear el Sistema de Planificación para la Producción Rural Agropecuaria (Sipra). Con esta plataforma web gratuita, los productores del campo pueden acceder a datos geográficos como frontera agropecuaria, zonas para cultivo y restricciones ambientales o legales.

Las cifras muestran que los campesinos utilizan sus dispositivos, principalmente, para buscar asistencia técnica y mejorar su producción. A pesar del interés que existe por estas tecnologías, siete de cada diez productores no recibieron ninguna capacitación para usarlas. Colombia tiene el reto de brindarles a los agricultores el acceso a las herramientas, y de formarlos y darles acompañamiento. Se trata, en suma, de sembrar en ellos la semilla de la tecnología.