Desde que el Gobierno nacional pidió al consorcio encargado del Metro de Bogotá evaluar la posibilidad de que una parte o la totalidad del trazado fuera subterránea, algunos políticos han afirmado que tal solicitud obedece a un capricho del presidente Gustavo Petro; uno de ellos es Enrique Peñalosa.

La tarde de este 10 de noviembre, Peñalosa volvió a manifestar su inconformismo con la petición del Gobierno, dado que fue él, como alcalde de Bogotá, quien firmó el contrato para que la primera línea de este medio de transporte fuera elevada.

Lo que llamó la atención del trino del exalcalde fue haber expresado su malestar contra Petro respondiendo a una cuenta fake del mandatario –o a una cuenta de apoyo, como se lee en su descripción–, hecho que no pasó desapercibido entre usuarios de esa red social. Aunque algunos piensan que fue intencional, otros plantean que se confundió con la cuenta oficial del presidente.

La cuenta @PetroesPueblo publicó: “Lo que Peñalosa le hizo a los bogotanos y bogotanas negándoles varias veces el metro es sencillamente imperdonable”.

Y la respuesta de Enrique Peñalosa, como si estuviera respondiendo al mandatario y no a una cuenta falsa, fue: “Igual que Petro, su especialidad es decir mentiras y pendejadas. Lo cierto es que fuimos nosotros los que contratamos el Metro que está en construcción, lo que Petro fue incapaz de hacer. Y vergonzoso que Petro, en vez de comportarse como estadista, siga hablando como politiquero en campaña”.

Además de Enrique Peñalosa, el político Federico Gutiérrez, con quien fue precandidato a la Presidencia en la coalición Equipo por Colombia, pidió que se respete el Metro de Bogotá como está contratado.

“Que si metro elevado, que si subterráneo… Ya los estudios técnicos están y hay obra contratada. ‘Acuerdo’ entre Claudia López y Petro de solicitar que un tramo sea subterráneo es puro capricho y ego. Se van a joder el metro, a Bogotá y a su gente”, dijo Federico Gutiérrez.

Entretanto, el presidente Gustavo Petro respondió: “El que la ciudadanía tenga un sistema de transporte cómodo, no contaminante y poderoso para una ciudad de 8 millones, no es cuestión de ego, es de dignidad. Quizás ustedes, Fico, quisieran que la gente sea transportada como animales, yo quiero que sea tratada como personas”.