México vivió un fin de semana amargo tras el asesinato a balazos del alcalde de la ciudad de Uruapan, en el estado de Michoacán, una región azotada por la violencia y el crimen organizado.
Se trata de Carlos Manzo, quien fue ultimado mientras asistía a un evento público en Uruapan, con motivo del Día de Muertos, que se celebró en México este fin de semana con diferentes eventos.
Tras lo hechos, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, aseguró que el crimen de Manzo, asesinado el primero de noviembre, no quedará en la impunidad y garantizó que su gobierno apoyará con la investigación.
“Lo digo con toda claridad: no habrá impunidad. Vamos a seguir todas las investigaciones hasta poder dar con los responsables, no solo materiales, sino también con quien ordenó esta ejecución”, afirmó la mandataria.
Estas palabras originaron la reacción del presidente de Colombia, Gustavo Petro, quien a través de su cuenta personal en X propuso la creación de un observatorio sobre el crimen organizado.
“Es importante que se configure el observatorio sobre el crimen organizado entre México y Colombia. La lucha común contra mafias multinacionales bien cimentada y apoyada en el análisis y la inteligencia de alto nivel, puede ser victoriosa en favor de la democracia de los pueblos”, indicó.