Las autoridades de Estados Unidos siguen de cerca el avance de la pandemia en su territorio y evalúan constantemente los efectos que la vacunación está teniendo sobre la población. En medio de este seguimiento, se comprobó que las personas no vacunadas tienen mayores posibilidades de presentar una enfermedad grave y morir, como otros estudios lo han ratificado.

Un nuevo estudio de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) señala que las personas completamente vacunadas tuvieron 11 veces menos probabilidad de morir de covid-19 y estuvieron 10 veces menos propensas a ser hospitalizadas desde que la altamente contagiosa variante delta se convirtió en la más común del virus, dijeron las autoridades de salud de Estados Unidos este viernes.

En el estudio, los CDC examinaron la efectividad de las vacunas contra las consecuencias más severas de la enfermedad. Por razones no del todo claras, los datos de uno de los estudios sugieren que la vacuna de Moderna ofreció un nivel levemente superior de protección en el periodo donde prevaleció la variante delta.

El estudio se conoce un día después de que el presidente Joe Biden anunció un nuevo y contundente plan de inmunización que incluye requerimientos a las compañías que empleen a más de 100 trabajadores para que los vacunen o les realicen pruebas semanalmente.

“Como hemos visto estudio tras estudio, la vacunación sirve”, dijo el director del CDC Rochelle Walensky durante un comunicado de prensa este viernes.

El primer estudio examinó cientos de miles de casos en 13 jurisdicciones de Estados Unidos entre abril 9 y junio 19, antes de que delta fuera dominante, y los comparó con datos recopilados entre junio 20 y julio 17. De un periodo al otro, el riesgo de las personas vacunadas de infectarse con covid se incrementó levemente: pasaron de ser 11,1 veces menos propensos a ser infectados frente a los no vacunados, a 4,6 veces menos.

La protección contra el riesgo de hospitalización y muerte se mantuvo más estable, pero cayó más entre mayores de 65 años con referencia a los grupos más jóvenes.

El CDC y la Food and Drug Administration (FDA) están evaluando la necesidad de poner vacunas de refuerzo, y es probable que los mayores estén entre los primeros en recibirlas cuando la administración Biden comience a distribuirlas a finales de este mes.

Uno de los estudios, que evaluó la efectividad de la vacuna entre junio y agosto en más de 400 hospitales, departamentos de emergencias y clínicas de urgencias, examinó la eficacia de cada laboratorio.

La vacuna de Moderna tuvo la mayor eficacia contra la hospitalización con un 95 %, luego Pfizer con 80 % y, finalmente, Johnson & Johnson con el 60 %.

Los CDC también alertaron en los últimos días que las muertes diarias por coronavirus aumentaron en el país un 131 % en el último mes. Por el momento han muerto en Estados Unidos a causa de la pandemia más de 640.000 personas.

La variante delta es ya la principal responsable de los nuevos ingresos hospitalarios, con 89.916 pacientes el 2 de septiembre, cifras que no se habían visto desde el 30 de enero cuando 89.657 personas tuvieron que ser hospitalizadas. En algunos estados, como Georgia, Kentucky y Hawái, no hay espacios libres en las unidades de cuidados intensivos.

Los CDC han informado también de un aumento de los ingresos de niños y adolescentes. El principal responsable de la lucha contra el coronavirus en Estados Unidos, Anthony Fauci, señala que todavía no hay datos para determinar que esta variante se presenta de manera más agresiva entre los menores de edad, quienes puede acceder a la vacuna de Pfizer a partir de los 12 años.

*Con información de la AFP y Europa Press.