Junio es probablemente uno de los meses que más expectativas genera en los trabajadores de Colombia. Más allá de ser una temporada en la que algunos aprovechan para desconectarse y tomar unas vacaciones, es también el momento en que reciben un dinero adicional. Se trata de la prima de servicios.

Este rubro que los empleadores deben cancelar en junio y diciembre es en esencia una prestación social que consiste en el pago de 30 días de salario o la proporción temporal que el trabajador hayan prestado sus servicios, los empleados que tienen contrato laboral. Se trata de un incentivo económico contemplado en la ley, derivado de las ganancias que la compañía genera a partir de su gestión y las actividades que realiza.

Para calcular la suma exacta a la que tiene derecho cada colaborador, solo basta con multiplicar el salario base por los días trabajados durante el año. El resultado de esta operación se debe dividir entre 360.

Por ejemplo, si el salario base del colaborador es de $3.000.000 y la persona trabajó todo el primer semestre (180 días laborales), la operación se deberá efectuar de la siguiente manera: ($3.000.000 x 180) / 360. El resultado del ejercicio es $1.500.000 pesos, suma que deberá ser consignada a la cuenta del beneficiario.

Así las cosas, a millones de trabajadores en Colombia solamente les queda esperar a que sus empresas les paguen este dinero, para luego pensar en cómo usarlo. En caso de que se incumpla con esta normativa, las personas afectadas podrán denunciar ante el Ministerio del Trabajo, para que esta autoridad adopte las medidas que sean necesarias.

¿Cómo hacer mejor uso de la prima?

Este quizá es el primer interrogante que los beneficiarios deben plantearse al recibir su dinero. Antes que nada, es importante que cada persona establezca prioridades para su uso, lo cual se traduce en un buen ejercicio de planificación financiera. Hay que tener presente que este es un dinero extra que no está contemplado en el presupuesto personal, lo cual permite que cada persona lo pueda destinar a su discreción para ahorro, inversión, o incluso, para un gasto.

Para tener mayor claridad sobre la manera en la que se puede realizar un mejor uso de la prima de servicios, la firma Tyba plantea tres escenarios que ayudan a los trabajadores a destinar de forma efectiva y adecuada estos recursos:

1. Pago de deudas u obligaciones: Antes que nada, en este punto es necesario analizar ¿en qué casos valdría la pena usar la prima de servicios para el pago de una deuda? La recomendación de Tyba es usarlo cuando los intereses del pasivo sean superiores a lo que se puede ganar en una alternativa de inversión. Si el escenario no es así, es preferible invertir ese dinero, pues la rentabilidad de la alternativa de inversión será superior a los intereses que se deben pagar en la deuda.

2. Ahorro: El ahorro es una iniciativa que permitirá crear o robustecer un fondo de emergencia. Se trata de una estrategia que ayudará a hacerle frente a cualquier tipo de eventualidad o situación que requiera liquidez para solucionarlo.

3. Invertir: Se trata de un ejercicio que además de fomentar un hábito saludable para las finanzas personales, permite que el dinero trabaje para el beneficiario al estar generando una rentabilidad. Esta es una alternativa bastante favorable, en cuanto disminuye el efecto de la inflación y con la cual se pueden planificar metas futuras, como la compra de un carro o vivienda o financiar estudios, o incluso, solo hacer crecer el capital. Además, algunas alternativas de inversión permiten al inversionista tener beneficios tributarios.

Sea cual sea la decisión que se tome, lo más importante es tener claro que el dinero se esfuma muy rápido si no se usa con inteligencia. Es por esto que los expertos de Tyba recomiendan darse un tiempo para pensar muy bien la mejor opción para destinar este rubro, teniendo presente que es una oportunidad para apuntarle a aquellos sueños que se quieran hacer realidad.