En Colombia, miles de jóvenes se gradúan de la universidad cada año con la esperanza de construir un futuro profesional sólido. Sin embargo, al enfrentarse al mercado laboral, muchos descubren que la inserción no está garantizada. De acuerdo con el informe más reciente del Dane, más de 2,5 millones de jóvenes entre 15 y 28 años no estudian ni trabajan.

Aunque el acceso a la Educación Superior ha mejorado en la última década, los datos reflejan el desafío urgente de las instituciones de repensar sus modelos educativos y orientar la formación hacia un enfoque innovador, práctico y conectado con las necesidades del entorno laboral.

Detrás de esas cifras hay jóvenes que, con aspiraciones y deseos de aportar, se enfrentan a obstáculos estructurales. Algunos deben cuidar a familiares o asumir responsabilidades económicas; otros, simplemente, no encuentran programas académicos que se ajusten a sus realidades o que les aseguren una verdadera proyección laboral.

La Educación Superior ya no puede replicar modelos tradicionales desconectados de las necesidades actuales. Se necesita una revolución académica que entienda los retos del siglo XXI y proponga soluciones concretas para resolverlos.

Ante este panorama, la Universidad Ean ya está construyendo el futuro. Bajo el liderazgo de la Vicerrectoría de Innovación Académica, consolidó un ecosistema educativo compuesto por cuatro ejes transformadores: Ean Virtual 2.0, la Dirección de Retos, el Programa de Credenciales y la Actualización de las Mallas Curriculares. Todos responden a problemas estructurales, como la rigidez, la desconexión con el mercado laboral y la baja empleabilidad.

En agosto de 2025, la Universidad EAN fue sede del evento global Enactus. Un espacio que reunió proyectos de emprendimiento e innovación y contó con la participación activa de sus estudiantes. | Foto: Cortesía Universidad EAN

Con EAN Virtual 2.0, la educación virtual dejó de ser un complemento para convertirse en una alternativa sólida que combina gamificación, simulaciones, IA y contenidos interactivos, rutas formativas personalizadas y acompañamiento constante con sistema de alertas, tutorías sincrónicas y oferta extracurricular.

Para el segundo semestre de 2025, 38 programas migrarán por completo a este modelo, con encuentros sincrónicos guiados por tutores, ajustados a la duración y los créditos del curso, lo que asegura una experiencia formativa sólida y flexible.

“En la Universidad Ean no esperamos que el futuro llegue. Lo construimos con rutas formativas audaces, conectadas con el mercado laboral, los desafíos globales y, sobre todo, con los sueños de nuestros estudiantes”, afirma Lorena Piñero, vicerrectora de Innovación Académica.

El aprendizaje también se conecta desde el primer semestre, con retos reales propuestos por empresas, ONGs y entidades públicas. Esta metodología, liderada por la Dirección de Retos, ha involucrado a más de 776 estudiantes, 25 proyectos y alianzas con 14 organizaciones, fortaleciendo la creatividad, el pensamiento crítico y la innovación.

En paralelo, las credenciales permiten certificar habilidades específicas antes de graduarse, con evaluaciones prácticas como proyectos, simulaciones y retos, y certificación blockchain. Más de 1.700 estudiantes ya cuentan con estas credenciales en áreas como IA, análisis de datos y sostenibilidad, lo que aumenta su empleabilidad y fomenta el aprendizaje continuo.

La transformación también se encuentra en las mallas curriculares, ahora alineadas con las tendencias globales y el mercado laboral gracias al Observatorio de Empleabilidad y la participación de docentes, graduados y sectores productivos. Con énfasis en bilingüismo, power skills (antes llamadas habilidades blandas), IA y prácticas, los estudiantes alcanzan un desempeño superior en menor tiempo y con formación pertinente.