El Zar Nicolás II de Rusia, el último de la dinastía Romanov, encargaba la elaboración de sus relojes a Louis-Ulysse Chopard, quien con solo 24 años era el dueño de su propia compañía. Con el tiempo, Chopard se consolidó como una reconocida marca de lujo y todo un referente de la relojería suiza.
La compañía se fundó en 1860 y se dedicó exclusivamente a la relojería hasta 1985, año en el que incursionó en la joyería con la primera colección de The Happy Clown. La marca ha perpetuado un patrimonio de habilidades artesanales y oficios tradicionales para la creación de joyas que, según la filosofía de esta firma, son sinónimo de ética y emociones. Guiada por una visión positiva de la vida, la firma celebra los momentos especiales de hombres y mujeres para quienes los relojes y las joyas son una extensión de su Joie de Vivre (alegría de vivir).
La visión de Chopard actúa a través del prisma de tres elementos: artesanía, creatividad y ética. “La artesanía es garantizada por el trabajo de expertos en sus respectivos campos; la creatividad abundante y generosa, permite a cada individuo encontrar los objetos preciosos más acordes con su propia naturaleza; y, por último, la ética está fuertemente implicada en las decisiones estratégicas de la Maison”, afirman desde la marca.
La familia Scheufele, propietaria de Chopard desde mediados del siglo XX, considera que el lujo contemporáneo debe ser “necesariamente ético y responsable”. Por esta razón, en 2013 Caroline y Karl-Friedrich Scheufele, copresidentes, lanzaron el Viaje al Lujo Sostenible, que los llevó en 2018 a comprometerse a utilizar oro ciento por ciento ético en la producción de todos sus relojes y joyas. A partir del 2020, y como parte de su cadena internacional de suministro completamente trazable y responsable, Chopard, en colaboración con la Asociación Suiza para un Oro Mejor (SBGA), compra oro proveniente de los barequeros del departamento del Chocó, en Colombia.
Los barequeros son mineros que obtienen el oro de manera artesanal, de los cuales el 46 por ciento son mujeres. Ellos usan técnicas tradicionales de minería aluvial y trabajan con herramientas manuales como sistemas de esclusas y bateas. Además, en este sistema de trabajo no se utiliza mercurio, lo que ayuda a proteger la biodiversidad de esta región, que se encuentra entre las más biodiversas del mundo.
El 2023 es ópalo rosa
Este año la icónica colección Happy Hearts incorpora un corazón de ópalo rosa. El símbolo del corazón es un emblema que la marca reinterpreta en nuevas versiones, pero conserva la identidad que se le otorgó desde sus inicios. “Es la alianza definitiva de dos íconos: el corazón y los diamantes móviles, que se integran ligeros y alegres, frescos y dando vueltas sobre sí mismos, para dar vida a piezas de alta joyería suntuosas y únicas”, explican desde la firma.
Las piezas de esta colección se pueden usar solas o todas juntas. “Solas ocupan su lugar con discreción, pero con una enorme presencia. Varias son un festival de luz y de colores: malaquita, nácar blanco o nácar de Tahití, ónice (ónix), cornalina, deslumbrantes diamantes y, a partir de ahora, ópalo rosa. Los Happy Hearts bailan de forma delicada entre piedras preciosas y diamantes móviles”, precisan desde Chopard.
El ópalo tiene un poder simbólico. Según la medicina tradicional india, es la piedra del chakra del corazón, se le atribuyen propiedades para sanar heridas emocionales y aportan una sensación de paz y serenidad. También se dice que estimulan la imaginación y la creatividad y que fomentan la apertura mental y la autoaceptación.
Una marca global
La compañía, con más de 2.000 empleados en todo el mundo, asegura tener una operación integrada e independiente, en la que controla la totalidad del proceso, desde el diseño hasta la comercialización, que se realiza a través de 14 filiales, mil puntos de venta y más de 155 boutiques en donde Bauer Colombia es uno de sus principales distribuidores.
“Más de 50 oficios se practican en tres centros de fabricación, haciendo especial hincapié en la formación y la transmisión del conocimiento. La maestría de Chopard en alta relojería se reconoce en la colección L.U.C, una línea de relojes excepcionales creados para el caballero contemporáneo. La empresa también es reconocida por sus colecciones Alfombra Roja, Alfombra Verde y Jardín de Kalahari. Así mismo, por propuestas icónicas de relojería y joyería como las colecciones Happy Diamonds, Happy Sport, Alpine Eagle y Mille Miglia”, señalan desde la compañía.
Desde hace varias décadas Chopard ha sido patrocinador de dos vitrinas globales del lujo: El Festival de Cine de Cannes y la mítica carrera automovilística 1000 Miglia, que se corre en Italia cada año.
*Contenido elaborado con apoyo de Bauer Colombia