La miopía aumentó en todo el mundo de manera significativa. Se estima que entre el 5 y 10 por ciento de los niños en edad preescolar tienen problemas visuales, y entre el 5 por ciento y 7 por ciento de los que presentan trastornos de refracción requieren de corrección. Durante la etapa escolar es frecuente detectar dificultades visuales, por eso la recomendación es asistir a consulta de manera periódica para prevenir y cuidar la visión.

Nury Herrera, optómetra y jefe de la Dirección Científica de GMO Colombia, explicó que además de las condiciones genéticas, el aumento de defectos refractivos como miopía, hipermetropía o estrabismo en niños se debe también a factores medioambientales y, sobre todo, la sobreexposición durante tiempos prolongados a dispositivos electrónicos. “Cada vez es más común que las familias utilicen celulares o tabletas para distraer a los bebés y a los niños pequeños. Con esta visión tan cercana a los aparatos se miopiza el ojo”, explicó Herrera, y agregó que este tipo de prácticas causan el Síndrome Visual Digital, que produce fatiga visual excesiva asociada a la resequedad e irritación ocular. “El ojo puede verse afectado porque se reduce la frecuencia del parpadeo o hay parpadeos incompletos, y eso puede generar problemas de enfoque de visión lejana”, puntualizó.

Para evitar estos problemas, se recomienda realizar pausas activas. De hecho, lo más indicado es que por cada 20 minutos frente a la pantalla, se descanse durante 20 segundos mirando lo más lejano posible. Además, es necesario ser más consciente del parpadeo, hacerlo completo y mucho más seguido.

Signos de alerta

Existen múltiples factores que influyen en el rendimiento académico, y la visión es uno de ellos. Algunas señales de alerta que indican que algo no está bien son los problemas de atención, de coordinación en actividades físicas, dificultades en lectoescritura, dolor de cabeza, frotarse los ojos con frecuencia, ver televisión o computador a corta distancia y el enrojecimiento de los ojos.

Herrera aseguró que todo esto puede ser causado por problemas que deben ser corregidos a tiempo para evitar la aparición de afecciones como ojo perezoso o ambliopía, comunes en niños y adolescentes que no tuvieron una corrección visual temprana. Para atender estas alteraciones hay que hacer un examen anual y revisión completa desde el primer año de vida.

En el caso de que la recomendación sea usar gafas con lentes oftálmicos para corregir la miopía, se aconsejan los lentes Stellest®, que ayudan a disminuir la progresión a través de una tecnología especializada. En cuanto a monturas para niños, con materiales hipoalergénicos, flexibles y maleables con fácil ajuste al rostro, la marca Miraflex ofrece modelos coloridos, diseños anatómicos y que no tienen partes metálicas. Ambas marcas están disponibles en www.gmo.com.co y las tiendas GMO a nivel nacional.

Para una buena salud visual:

1. Más tiempo al aire libre.

2. Menos tiempo frente a pantallas.

3. En caso de estudio, descansar cada 20 minutos.

4. Parpadear constantemente.

5. Utilizar gafas de sol con filtro UV 400.

*Contenido elaborado con apoyo de GMO

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