Ovidio Guzmán, quien fue capturado el pasado 5 de enero en Culiacán, negó en una audiencia judicial frente a un juez federal de México ser hijo del ‘Chapo’ Guzmán, capo del narcotráfico mexicano.
En la audiencia, que se llevó de manera virtual desde el Centro de Justicia Penal Federal ubicado en el municipio de Almoloya de Juárez, Ovidio aseguró no ser el delincuente que Estados Unidos está buscando.
“No soy la persona que ellos creen, que reclama Estados Unidos”, se le escuchó decir a Guzmán según declaraciones publicadas en medios de comunicación mexicanos.
El abogado de Ovidio ahora tiene tres días para presentar las pruebas necesarias y demostrar que no es hijo del Chapo. Eso sí, se especula que esta estrategia por parte de la defensa del acusado es para seguir dilatando el proceso de extradición que recae sobre él por parte de Estados Unidos.
Precisamente, el pasado 27 de febrero el gobierno estadounidense presentó a México la solicitud formal para la extradición de Ovidio Guzmán. La embajada de Estados Unidos presentó a la cancillería y a la Fiscalía General el expediente con el que se acusa a este hombre, uno de los líderes del cartel de Sinaloa, detalló un vocero gubernamental que pidió no ser identificado por no estar autorizado a declarar.
Pero el 25 de enero también se conoció por parte de las autoridades judiciales mexicanas, la decisión de frenar, de forma “indefinida”, el proceso de extradición de Ovidio a Estados Unidos. Esta decisión responde a la atención de una medida de amparo interpuesta por la defensa del señalado.
Si bien el recurso aceptado por el juez en mención refiere una ‘suspensión definitiva’, la medida no representa que la eventual extradición del narcotraficante esté del todo descartada.
Guzmán hijo, conocido con el alias de El Ratón, fue detenido el 5 de enero en la ciudad de Culiacán (noroeste), en un operativo que dejó 10 militares y 19 presuntos delincuentes muertos. Autoridades y expertos en narcotráfico consideran que este hombre de 32 años, junto con tres hermanos, heredaron el liderazgo de El Chapo en el cartel de Sinaloa y se les conoce como Los chapitos.
Guzmán padre fue extraditado a Estados Unidos en 2017 para ser juzgado por una corte de Brooklyn, donde fue hallado culpable de delitos relacionados con trasiego de drogas y lavado de dinero, por los que fue condenado a cadena perpetua en 2019.
Tras su captura, Ovidio Guzmán obtuvo una suspensión judicial para impedir fuera entregado de manera inmediata a la justicia estadounidense, pero el juez que otorgó este recurso dio de plazo hasta el 5 de marzo para que Washington presentará la solicitud de extradición.
El gobierno estadounidense reclama a Ovidio Guzmán y a su hermano Joaquín por conspiración para exportar a ese país cocaína, metanfetaminas y marihuana. Por cada uno ofrece cinco millones de dólares de recompensa. México de su lado acusa a Guzmán hijo por delitos contra la salud y portación de armas de fuego, aunque también hay indagatorias vinculadas a la delincuencia organizada.