El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se refirió una vez más a la posibilidad de entrar en una guerra en Latinoamérica, en el marco del gran despliegue militar de Estados Unidos en el mar Caribe cerca de Venezuela.
El presidente Donald Trump afirmó que no desea entrar en una guerra, aunque advirtió que, si ocurre, su país vencerá “rápido y con fuerza”. Las declaraciones coinciden con el reciente despliegue militar estadounidense.
“He detenido ocho guerras en los últimos nueve meses. No quiero una guerra, pero si estoy en una, la vamos a ganar rápido y será violento”, dijo Trump en entrevista con Laura Ingraham, de Fox News.
Sus comentarios llegan en un momento en que Estados Unidos reforzó significativamente su presencia militar en el Caribe con la llegada del USS Gerald Ford, el portaviones más grande del mundo, al área de responsabilidad del Comando Sur.
Además del portaviones, desplegó la semana pasada el USS Gettysburg, un crucero de misiles guiados y sistemas de misiles de lanzamiento vertical, para reforzar la misión, que según la Armada tiene como objetivo “garantizar la estabilidad, disuadir amenazas y fortalecer la interoperabilidad”.
Estados Unidos también continúa los sobrevuelos de bombarderos cerca de Venezuela, incluidos aviones B-52H y B-1B que operan frente a sus costas.
Donald Trump minimizó la semana pasada los temores de una guerra con Venezuela, pero dijo que cree que los días de Maduro en el poder están contados.
Por su parte, el ministro de Defensa de Venezuela, Vladimir Padrino, aseguró que el país latinoamericano tiene desplegados 200.000 militares para hacer frente a la “amenaza” que representa Estados Unidos en la región.
“El trabajo de cohesión, de preparación del pueblo, así como la elevación del apresto operacional de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) continúa en defensa de nuestra soberanía e integridad territorial. Un trabajo que se mantiene activo todos los días”, dijo en declaraciones recientes.
Padrino aseguró que Maduro ordenó elevar la preparación de los uniformados y de los organismos de seguridad: “Todos los días vamos optimizando, hemos hecho maniobras de campaña, (…) ejercicios de Estados mayores, de defensa de costas, de desconcentración de medios, de administración de desastres”.
Asimismo, dijo que este despliegue se ha iniciado este martes, pero se extenderá hasta el miércoles y cuenta con “200.000 efectivos para este ejercicio”, que contempla el mando, control y las comunicaciones, todo ello en el marco de “la amenaza militar que está emplazada en el Caribe, que no solo amenaza a Venezuela, sino a toda la región latinoamericana”.
A principios de septiembre, Estados Unidos comenzó sus ataques contra estas supuestas embarcaciones del narcotráfico que transitan por el mar Caribe y el océano Pacífico y, desde entonces, ha hundido una veintena y matado a 75 personas.
Con información de Europa Press*