Las jornadas de protestas del paro nacional, aunque siguen siendo esporádicas en algunas ciudades del país, son todavía muy dañinas, sobre todo para el sistema de transporte público, un blanco para el vandalismo.
En los últimos días, 17 buses afectados del sistema de MIO en Cali y un conductor lesionado fueron los resultados de distintos actos vandálicos cometidos contra el sistema. De acuerdo con lo reportado por las empresas operadoras del MÍO, la mayoría de los ataques se presentaron contra al menos 11 buses que fueron vandalizados mientras operaban por diferentes sectores de la ciudad.
El hecho que causó mayor indignación se registró el sábado 14 de agosto cuando el conductor de un bus resultó lesionado luego de que el vehículo fue atacado con un ladrillo.
“Un motociclista que invadió el carril exclusivo del MÍO arrojó un ladrillo; en el hecho destrozó los vidrios del lado izquierdo del vehículo. El conductor resultó herido en su cabeza y brazo izquierdo, debiendo recibir atención médica”, detallaron los operadores del Sistema Masivo.
Frente a estos hechos, que no son nuevos y han ocurrido desde hace meses, la Policía Metropolitana de Cali anunció la creación de un grupo especial de la institución que tendrá como objetivo prevenir hechos que puedan afectar a los usuarios y la infraestructura del sistema de transporte masivo.
El grupo contará con el apoyo de las patrullas del modelo de vigilancia por cuadrante, unidades de investigación judicial, inteligencia, Gaula, reacciones motorizadas y el sistema de vigilancia aérea a través de drones para evitar que sigan ocurriendo estos actos de vandalismo.
”Ya venimos haciendo un trabajo con la Alcaldía y nosotros también estamos realizando actividades en diferentes estaciones del MÍO donde sabemos que tenemos la mayor afectación. Ya nos comprometimos directamente con un grupo de Policía Judicial y un grupo de inteligencia a mirar todos estos vándalos que siguen arrojándole piedras a los buses para romperle sus vidrios”, informó el brigadier general Juan Carlos León, comandante de la Policía Cali.
El grupo especial operará en corredores específicas del sistema, según señaló el general León. Las rutas que recibirán acompañamiento serán, principalmente, las que se desplazan por el centro y oriente de la ciudad.
“Estamos esperando realizar el convenio con la empresa del MÍO, ya un convenio que se tuvo años anteriores donde hacemos una cobertura total de todo el sistema. En este momento, como no tenemos convenio y es una empresa privada, estamos prestándole ese acompañamiento a la Alcaldía”, añadió el alto uniformado.
¿Qué pasará con el funcionamiento del MIO?
Los problemas económicos de los sistemas de transporte masivo en Colombia cada vez se hacen más evidentes. La pandemia del coronavirus causó una caída en la demanda durante gran parte del 2020 y el paro nacional, que se extendió por más de dos meses, dejó daños históricos en la infraestructura de estos medios.
Aunque no es la primera vez que se menciona, los operadores del Sistema Masivo Integrado de Occidente (MIO) en Cali alertaron de nuevo sobre los problemas de sostenimiento por los que atraviesan y aseguran que una parte de la flota está a punto de quedarse parqueada y sin prestar el servicio pues las soluciones no se están materializando.
A raíz de esta situación, Gonzalo Cucalón, vocero de GIT Masivo, uno de los operadores, explicó que son necesarios unos 180.000 millones de pesos para que el sistema garantice la prestación del servicio, ya que hasta ahora el recaudo por pasajes no es rentable.
En diálogo con el medio local Radio Calidad, Cucaló dijo que los recursos existentes no son suficientes “para cubrir los costos de operación, entonces ese faltante lo cubre la Alcaldía municipal; hay unas cuentas que tenemos por pagar, todavía hay unas deudas con los bancos”.
Aunque el vocero señaló que la crisis viene de hace por lo menos 10 años, pues hay una cantidad de buses que adquirió el sistema y aún no han sido pagados en su totalidad, reafirmó que el Paro dejó en jaque al sistema, pues los recursos se están destinando a recuperar el 90 % de la infraestructura que resultó afectada.